56. HUIDA (PARTE 3)

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-no sé de qué me está hablando-le dijo Isaac con seriedad, sin despegar la mirada de Sherlock, quien por dentro se encontraba más que complacido por haber logrado captar su atención.

-en Hydra le ofrecieron un excelente trabajo, buena paga, muchas facilidades, pero, sobre todo, alimentaban su sed de conocimientos, su más grande obsesión... y también su debilidad-

-trabajo de investigación ¿en serio cree que me sorprende con eso? Incluso Stark pudo haber sabido eso sin mayores dificultades-

-pero es ahí donde comienza la parte interesante, un dato que admito no le dimos mucha importancia... hasta ahora-dijo el detective, haciendo una breve pausa, haciéndole una seña a John para que le mostrará los papeles que llevaban consigo-después de aproximadamente 6 años que inicio este juego, alguien creería que luciría más desgasto, creo que viejo sería la palabra apropiada, sin embargo, es todo lo contrario ¿le suena el nombre de Emer Brown? –pregunto, haciendo que al escuchar el nombre, Holmes levantara la vista, reconociéndolo al instante-

- ¿Debería? -

-científico, con una carrera cerca de lo mediocre, pocas amistades y una vida desperdiciada en un invento que jamás funciono-comenzó a decir Sherlock, con John levantándose casi de inmediato y poniendo una de sus manos en el pecho del detective, protegiéndolo como un reflejo ante el inesperado arrebato de Burrell, que se había inclinado con claras intenciones de hacer daño a Sherlock, solo siendo detenido por sus propios amarres.

- ¿Holmes? -lo llamó Watson al ver el inesperado brillo que habían tomado sus ojos, igual que cuando lograba resolver un complicado caso. Y aquel había sido el más difícil que habían tenido que resolver.

-al principio había sido tomado como un intento de robo, parecía algo sencillo para Scotland Yard, un ladrón que entro a la casa y fue descubierto por el dueño, asesinándolo y huyendo sin haber tomado nada, seguramente nervioso al ser un novato, nadie creyó que hubiera alguna relación con que la victima fuera un científico, fue tomado a la ligera, simple mala suerte, considerando que días atrás, él, junto dos compañeros científicos más, dieron a conocer sus avances en una ambiciosa investigación...-comenzó a decirle Holmes, con su mente comenzando a unir los cabos sueltos, mientras hablaba.

-triple asesinato, los tres científicos... y los tres conocían a Brown-continuó hablando Sherlock, disfrutando de la reacción de Burrell hacia sus palabras-él los asesino, argumentando que habían robado su trabajo, pero sin pruebas, fue condenado a la horca por sus crímenes-

- ¡lo hicieron y lo sabe! -

-el invento la maquina del tiempo que usaste al principio, sin embargo, ya tenía fama de haber perdido la cabeza, pues los objetivos que perseguía en cada una de sus investigaciones eran bastante descabellados, nadie en su sano juicio apoyaría los resultados obtenidos por una máquina que supuestamente pudiera hacerte viajar en el tiempo-

-ellos sabían que era cierto, los datos no tenían objeción ¡todo estaba bien! Pero fueron unos cobardes, temieron los llamaran también locos y perdieran sus trabajos-exclamo Isaac con molestia.

-pero sabían que podrían aprovechar esa información de otra manera, por lo que omitieron lo de viaje en el tiempo y lo mostraron como el estudio de una nueva fuente de energía, guardando para ellos la máquina, que era lo que Emer buscaba cuando entro a sus casas, matándolos apenas se negaron a decirle su ubicación-continuo John, que ya estaba al tanto de todo lo que su compañero había descubierto, sonriendo un poco mientras negaba, pues aún le costaba digerir la historia, que aquello hubiera sido lo que causo todo.

-cuando hallaron a los otros dos científicos muertos bajo las mismas condiciones, se sospechó tenían que ver con el trabajo de su investigación, Watson y yo nos mantuvimos informados del caso por medio de los periódicos, sin embargo, no llegamos a intervenir de forma directa-les explico Holmes a los demás al notar su confusión.

4. DETECTIVES: ENCRUCIJADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora