4. DETECTIVES: ENCRUCIJADA

36. PENSÉ EN HACERLO

Toda una serie de eventos catastróficos pasaban por la mente del rubio en esos momentos, como si ya no se encontrara dentro de aquella mansión, como si de repente todo hubiera desaparecido de su alrededor.

-no...no de nuevo-pronuncio con gran terror, pues no podía soportar aquello, la duda, la incertidumbre-debe estar cerca, debe... ¡Hay que encontrarlo!-exclamó Steve, con un fuerte temblor sacudiendo su cuerpo, que le decía que era algo real.

-¡hey! Trata de mantener la calma-

-no, Nat, si Tony no está...-

-si no estoy ¿en dónde?-pregunto alguien a sus espaldas, con un tono de diversión bastante pronunciado, sobre todo después de lo que había escuchado-mira capipaleta, que antes de perder la cabeza primero tienes que asegurarte que lo que crees que está pasando, realmente está pasando, recuerda que a pesar de todo sigues siendo un anciano de más de 100 años, no puedes exponerte a un ataque al corazón solo porque si-

Watson no pudo evitar sonreír, aunque realmente también se encontraba aliviado. Preocuparse estaba dejándolo bastante agotado.

-creímos que...-

-lo sé, hormiguita, lo sé, escuche esa parte-lo interrumpió Tony, mientras se acercaba más a ellos, subiendo el último escalón que le faltaba-debo admitir... que lo pensé, de hecho, pensé en hacerlo-

-Tony...-

-no, Steve, déjame terminar-le pidió el millonario, avanzando a paso inseguro-pensé en hacerlo, porque creí que era lo mejor, de hecho aún lo creo... entregarme, para que Isaac deje de hacerles daño también a ustedes, no parece una mala idea-

-pero...-dijo Nat, motivándolo a seguir, comenzando a entender a donde iba todo aquello.

-pero cuando estaba por irme... te escuche-terminó susurrando-¿era cierto?-

-si-respondió Steve, con su vista clava en el millonario, tardando en reaccionar antes de volver a hablar-todas mis palabras lo fueron-

-bien-acepto Tony, dejando que un silencio incomodo se instalara en la habitación. Aún sentía deseos de irse, de parar todo eso pero ¿y si solo lo empeoraba? Tal como había escuchado, ellos habrían salido de inmediato en su búsqueda, poniéndose en peligro a sí mismos y a los demás.

-y...-comenzó a decir Peter, pues no parecía que Steve y Tony fueran a dejar de verse a los ojos pronto-¿Qué es lo que vamos a hacer?-

-ya tenemos un plan, pero primero debemos asegurarnos que Isaac no lastime a sus rehenes-respondió la espía.

-¿hay algo que yo pueda hacer?-pregunto el millonario-no harán que me arrepienta de haberme quedado ¿o sí?-

-tú te quedaras con Peter-le dijo el rubio en respuesta, notando como Tony estaba por reclamar-solo escúchame, sé que puedes cuidarte solo, por eso dejo a Peter a tu cargo-

-¿a mí?-pregunto el chico confundido.

-sí, Peter, es de lo que estuvimos hablando ¿recuerdas?-le pregunto Nat.

-oh, sí, ya recordé... eso de que... me quedaría con el señor Stark para...-

-cuidarte-completo Steve.

-sí, eso-

-vamos, sé que eso no era-intento quejarse el millonario, pues aquellos guiños entre ellos no servían para engañarlo-Isaac me quiere a mí, así que de algo debo ser de utilidad-

-Hay algo-

-no, Nat-le dijo Steve de inmediato.

-¿Qué cosa?-