Capitulo 44 - Luna María

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-Narra Dulce-

Sonrío al sentir sus manos subiendo por mis piernas hasta llegar a mi cintura mientras sus labios recorren mi hombro desnudo.

Víctor: buenos días.

Dulce: buenos días.

Víctor: ¿Cómo durmieron mis hermosas mujeres?

Enredo mis brazos en su cuello cuando volteo para mirarlo y lo atraigo para darle un casto beso.

Dulce: dormimos como bebés.

Víctor: mmm... que bueno.

Mientras su mano se pasea por mi vientre acariciando a nuestra hija se acerca y toma mis labios una vez más, ahora haciendo el beso más intenso y explorando cada rincón de mi boca hasta quedarnos sin aire.

Dulce: ¿Qué piensas hacer ahora eh?

Víctor: no sé... tal vez podríamos repetir lo de anoche.

Me mira pícaramente y río escondiendo mi cara en su hombro sintiendo mis mejillas arder.

Víctor: ¿Qué pasa pitufina? ¿Ahora te da vergüenza?

Dulce: noooo ya cállate que tu hija está acá.

Víctor: aún no entiende, de momento mientras la tengas ahí encerradita papá y mamá pueden disfrutar juntos.

Dulce: Víctor... no Víctor ¡estate quieto por favor!

Comienzo a reír cuando empieza a besar mi cuello y trato de pararlo sin demasiado éxito hasta que suena su teléfono y ahora sí se detiene. Lo toma para ver quien es y lo veo suspirar cuando me incorporo para mirarlo.

Víctor: lo siento amor es mi representante.

Dulce: tranquilo, contesta y yo mientras voy a darme una ducha.

Víctor: de acuerdo, ten cuidado.

Asiento y beso sus labios antes de levantarme de la cama para dejarlo atender la llamada mientras yo me relajo bajo el agua de la ducha.

Dejo que el agua caiga por mi cuerpo mientras me enjabono el cabello y al hacerlo con mi cuerpo me detengo por unos momentos en mi vientre, siento a mi hija moverse y mi vientre se endurece haciéndome sentir extraña. Termino de ducharme y me pongo algo cómodo para ir hacia la cocina donde Víctor ya prepara nuestro desayuno.

Víctor: mi amor que hermosa te ves.

Dulce: mentiroso.

Me acerco para saludarlo con un beso y me hago cargo de las frutas que estaba preparando.

Dulce: ¿hablaste con tu representante?

Víctor: sí.

Dulce: ¿y que quería?

Víctor: me propuso ir a Puebla para ambientar una fiesta.

Dulce: que bien mi amor ¿Cuándo es?

Víctor: pues es en dos días pero yo no iré.

Dulce: ¿Qué? ¿Por qué?

Víctor: ¿será porque mi mujer ya salió de cuentas y puede dar a luz en cualquier momento?

Dulce: Víctor no pasa nada, yo sé que te encanta trabajar de Dj y deberías ir no creo que a Luna se le dé por conocerte esa noche.

Víctor: ¿y si sí? ¿Qué pasaría si te pones de parto entonces?

Dulce: no...

Me quedo callada y me apoyo en la encimera cuando siento un pinchazo en la parte baja del vientre que me hace doblarme.

Quiero AmarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora