Capitulo 61 - Primer Día De Escuela

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Dos Meses Después...

-Narra Dulce-

Cuando salgo de la ducha enredo una toalla en mi cuerpo y al tratar de anudarla me cuesta más trabajo que hace unas semanas pero poco me importaría si no pudiese hacerlo porque la razón de ello es la más hermosa que pueda existir. Al verme al espejo llevo mis manos de inmediato hasta mi vientre, ya se nota abultado pero no me importa. Mi bebé crece fuerte y muy sano cumpliendo la semana dieciséis de este embarazo.

Aún no hemos querido hacerlo oficial aunque estamos completamente de acuerdo que lo haremos de la misma forma que lo hicimos con Luna aunque esta vez no lo ocultaremos, Víctor cada día que pasa está más consentidor pero sobre todo protector. A cada minuto del día está detrás de mi preguntándome como me encuentro y cuando salgo o lo hace él es mucho peor, a veces hasta tengo que apagar mi teléfono para que deje de llamarme y mandarme mensajes.

Mis padres y mis suegros junto con toda nuestra familia recibieron la noticia con la mayor felicidad, todos ya quieren que nos reunamos para "conocer" al nuevo o nueva miembro de la familia porque al contrario que su hermana, este bebé aun no se ha dejado ver.

Y sus hermanos... Marcelo está loco de contento con la idea y al igual que con Luna todos los días insiste que será una niña, aunque yo no lo tengo tan claro Víctor también lo desea así. Se la pasa pidiéndole a sus padres que lo traigan para acá todo el tiempo para estar con sus hermanas, según él, y conmigo. Pero mi hija...

Luna sigue bastante enojada y no quiere ni oír hablar del bebé, hace berrinches a cada momento aunque Víctor consigue calmarla con apenas unas cuantas palabras bonitas y no es que todo el tiempo esté así pero su necedad es que no quiere a su hermano, ni oírnos hablar de él. Aunque aún así, mi pequeña sigue siendo la niña más hermosa y tierna de este mundo. Tiene un carácter horrible eso sí y cada día lo hace valer mucho más puesto que ya ha cumplido sus tres añitos, es una mezcla de carácter mío y de Víctor pero físicamente, según su padre, es idéntica a mí. Tiene mi cabello aunque más claro que cuando yo era niña y eso sí, sus ojos son idénticos a los míos.

Me visto con rapidez temiendo al tiempo que me queda porque hoy nada puede salir mal, no podemos llegar tarde

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Me visto con rapidez temiendo al tiempo que me queda porque hoy nada puede salir mal, no podemos llegar tarde. Porque hoy, es el primer día de escuela de mi pequeña, mi niña que cada día es un poco mayor. Cuando salgo del baño ya lista camino hasta el tocador para maquillarme un poco y terminar de peinarme y es entonces cuando puedo escuchar el escándalo que se trae mi hija con su padre, quejas y gritos mezclados con sus pasos recorriendo todo el piso superior de la casa.

Luna: que noooo ¡no quelo papi! ¡Ema dile que no!

Río al escucharla y ya puedo imaginarme porque grita de esa manera, odia que su padre la peine y tampoco soporta que Emma lo haga con esas coletitas que siempre le pone. Giro aún sentada frente al tocador justo cuando la puerta se abre de un golpe y mi hija entra corriendo y llamándome a gritos.

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