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Narra Marissa
Aún seguía en el pecho de Mesut, era tán cálido, que hizo que todos mis problemas se fueran.

Mesut se despega de mi y me mira los ojos -¿qué pasa Marissa?- pregunta con tierna voz.

-Lo siento....yo no debo estar aquí....solo estaba hablando con alguien- explico y Mesut frunce el ceño.

-¿Con quién?-

-Mi manager- respondo y Mesut se relaja -dijo que no podré jugar durante los próximos 6 meses- mis ojos quieren volver a sacar lágrimas, pero yo los impido.

Mesut me vuelve a abrazar -todo va a estar bien, esos 6 meses pasarán volando. Te lo aseguro- me decía.

-Gracias Mes, siempre me haces sentir bien- lo dije o lo pensé??!!!

-Me alegra pensar eso Marissa- ohh me escuchó Aghhh

Solté una risa nerviosa y ambos nos separamos. -Creo que debo volver allá fuera-

-¿No te puedes quedar?- pregunta con una mirada tierna. Ahhh por qué no me puedo concentrar!!!

-Mesut yo....- tartamudeaba por qué??

-Entiendo. Tu hermano. Ve, te veo en la fiesta- me sonrie y camino lejos de él.

Me arreglo lo suficiente para que no parezca que he estado llorando y me vuelvo a acomodar en mi asiento.

-Marissa ¿dónde estabas?- pregunta Christina.

-Me hablaron por celular, necesitaba silencio- explico.

-Amiga, el partido casi acaba. Te perdiste de mucho- me cuenta.

Pues ¿como por cuánto tiempo estuve con Mesut? Encerio el tiempo pasa muy rápido con él. Mesut

Cuando el partido termina, varias de las novias se habían ido. Olivier me dijo que lo esperara aquí mismo. Asi que le doy una revisada a mi celular.

Taylor me mandó los resultados, esto confirmaba mi lesión en el hombro, no entendía muy bien la letra del doctor, pero las radiografías no se veían muy bien.

Mis huesos del hombro se veían algo fuera de lugar y me pedían que no hiciera movimientos bruscos, o que levantara algo pesado. Genial, ni siquiera puedo ir al GYM

Siento que alguien se sienta a un lado mio, sin importar quién era acomodo mi cabeza en su hombro, estoy muy deprimida.

-¿Qué tienes Marissa?- pregunta Mesut.

Rápido me levanto y lo miro con nerviosismo, ¿qué traigo el dia de hoy?

-Mes, yo ehh...- decía pero me cortó.

-Descuida, somos amigos ¿si?- pregunta nervioso.

-Claro que si. Digo ¿por qué no lo seríamos?- pregunto algo extrañada.

-Bueno, la manera en cómo me trataste hace dos dias yo pensé que....-

-Oh no, yo pensé que tú ya no me querías hablar desde esa mañana- excuso.

-¿De verdad? ¿Pensaste que te dejaría de hablar por como me comporté contigo?- pregunta.

-Si-

-Yo fui el imbécil que la regó. Tú perdóname a mi- sus palabras son sinceras, su mirada es sincera.

-Te perdono una vez más- le respondo con una sonrisa.

Nos quedamos mirando por unos segundos y me senté con él a platicar. Fue una conversación para conocernos mejor. Él sonreía cada que hablaba, y yo lo miraba detalladamente cuando le tocaba hablar.

Creo que ya se lo que me pasa. Me está empezando a gustar. Nooo, no puede ser, ¿pero por qué? Él se preocupaba por mi, era muy amable conmigo, y dijo que estaría conmigo. Mesut me hace que el tiempo pase rápido, yo me siento muy cómoda a un lado de él. Hace que mis preocupaciones y el mundo se olviden.

¿Pero qué pasa si no le gusto? ¿Y si solo está siendo amable conmigo por ser la hermana de su amigo? ¿Y si aún siente algo por su novia?

-Peque siento la tardanza pero....¿qué haces aqui Mesut?- pregunta mi hermano.

-Oh hola Olivier. Solo aqui pasando el rato con tu hermana- responde nervioso Mesut.

-Aja, ya veo y ¿cómo sabías que ella estaba aquí?- cuestiona con el ceño fruncido.

-Yo eh...-

-Yo lo busqué- lo interrumpí.

-¿Qué?- pregunta Olivier.

-Si, yo....quería saber si tenía cintas que me podría prestar- excuso rápido.

-Ok, oh ¿y ya te dieron los resultados?- pregunta.

Agacho la cabeza -si, tengo 6 meses de reposo absoluto- susurro.

-Hermanita lo siento- dijo Olivier y me abrazó.

-No te preocupes, asi pasaré más tiempo aquí-

-Me alegro- suelta Mesut.

-¿Sabes lo que necesitas? Desahogarte. Ven, vamos a prepararnos para la fiesta- dice Olivier.

Narra Raúl
El viernes nos tocó jugar, ganamos 2-1. Me hubiera gustado que Marissa me hubiera visto.

Me encuentro en los vestidores, cambiandome para ir a casa. No estaba del todo feliz.

-Raúl, amigo ¿estás bien?- pregunta Eduardo.

-Si, si. Eduardo- respondo algo distraido.

-Si, oye Jonas va a hacer una fiesta. Va a ver de todo, quizá y te toque un aventón- me mira pícaro.

-Nah amigo, gracias- contesté.

-Vamos, nos toca la fiesta. Andale- me anima.

-No lo se yo...- decía pero me cortó.

-Raúl, debes olvidarte de esa chica, nunca te correspondio. La tipa te dejó ir, cometió un error- dice Eduardo.

Tiene razón en algo -esta bien. Iré- digo por fin.

-¡Si! ¡Te vas a divertir!- me dice.

-Pero nada de aventones. Aún no estoy listo- procuro.

-Tú te lo pierdes Raúl. Ven sígueme- dice y ambos salimos de los vestidores.

Sigo el carro de Eduardo hasta la casa de Jonas, algunos invitados ya estaban ahí. Ambos entramos y nos encontramos con un montón de gente, algunas personas ya están más que borrachas, bailaban por ahí, o se besaban.

Había muchas chicas hermosas, pero ningunas me llamaban la atención.

-Ven, vamos a tomar un poco- dijo Eduardo y los dos vamos al bar.

Unas chicas se acercan a nosotros, una de ellas empieza a coquetear a Eduardo, la otra conmigo.

-Dejate llevar Raúl- me dice y se va lejos de mi.

Si me voy a dejar llevar, debo estar lo suficientemente borracho para que no piense en Marissa.

Tomo mucha cervesa y me dejo llevar.

𝐋𝐀 𝐇𝐄𝐑𝐌𝐀𝐍𝐀 𝐃𝐄 𝐆𝐈𝐑𝐎𝐔𝐃 :: 𝗠𝗘𝗦𝗨𝗧 𝗢𝗭𝗜𝗟 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora