𝐋𝐀 𝐇𝐄𝐑𝐌𝐀𝐍𝐀 𝐃𝐄 𝐆𝐈𝐑𝐎𝐔𝐃 :: 𝗠𝗘𝗦𝗨𝗧 𝗢𝗭𝗜𝗟

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I never meant to leave you hurtin'
I never meant to do the worst thing
Not to you (this solo, solo, everybody)

Gracias a Dios que Arsène me dio permiso para salir unos días. Me comprendió y como también conoce a Marissa, accedió.

Solo habían pasado semanas desde la alocada fiesta de despedida y hoy era mi vuelo. Viajaba con mis hijos y ambos estaban profundamente dormidos.

Llegamos a América y lo primero que hice fue comprar otro viaje a Phoenix, ya que ahí era la casa de las Phoenix Mercury.

Me tomó bastante llegar y costó un montón por controlar a mis hijos, pero al fin estoy aquí, en la casa de mi esposa.

Busco la llave debajo de cualquier maceta y abro la puerta.

Su casa no estaba nada mal, buena decoración y buen acomodo de muebles. Lo primero que hago es poner a mis hijos en el sofá y darles de comer.

Me relajo una vez terminando y me pongo a reflexionar. No puedo creer que haya hecho esto. No va a funcionar, de seguro sabe que me acosté con esa puta y lo menos que quiere ver es a mi.

Recargo mi cabeza en el sofá y giro para encontrarme con una foto que me alegra el corazón.

Es una publicación de hace dos semanas mía, estaba yo con mis hijos jugando en el patio. No lo podía creer. Marissa nos tiene reciente.

Ella no me odia.

O será porqué aún no sabe que me acosté con alguien más???????

No quería pensar lo peor.

Oigo como tocan la puerta, así que me aproximo a ella y me encuentro con él. El mexicano que ha estado viviendo con mi esposa.

-Moreno- digo en seco.

Lo veo algo bien vestido y con..... flores? Acaso son para mi Marissa?????

-Özil, no sabía que estás aquí. Está Marissa?- pregunta.

Héctor Moreno

No se qué me pasaba estas últimas semanas. Iba a terapia y no dejaba de pensar en el cuerpo de diosa que tiene Marissa.

Solo bastó con una noche para darme cuenta que esa francesa me trae como loco.

Creo que......... estoy enamorada de ella. Y no importa que esté casada. La quiero.

Así que hoy iría a declararle mi amor por ella. No sé con qué me pararía el futuro, pero, debía decírselo.

Llego a su casa y en cuanto se abre la puerta, el corazón se me detiene. Su esposo está aquí.

Puta madre!

Verga! Me vio que traigo las pinches flores!

Su voz se oía enojado. Pues claro. Un mexicano le trae rosas a su esposa, por qué no estaría celoso?

Le pregunto por Marissa.

Me pongo muy nervioso, los alemanes pueden ser rudos y firmes, son una de sus cualidades más notables.

-No lo se. Qué haces aquí?- cuestiona con un tono frío.

Rápido Moreno, di algo rápido!!

-Espero a tu esposa. Necesito su ayuda- miento.

Özil me mira con cara de pocos amigos, sin embargo, me deja pasar. La tensión en la casa de la basquetbolista francesa se incrementa, sino fueran por los dos niños gemelos que se encontraban sentados en el sofá.

-Puedo cargar uno de ellos?- pudo con cierto nerviosismo.

Mesut Özil

De verdad acaba de preguntar eso???? Cree que lo voy a dejar cargar a uno de mis hijos????

-Solo ten cuidado- concedo finalmente con un toque de advertencia.

Moreno algo asustado, carga a Jayden con sus brazos. Veo que mi hijo saca una leve sonrisa al ver al mexicano que lo carga.

Al presenciar aquello, una furia se desata en mi, serán otra vez celos?? yo creo que si. Digo, apenas es un bebé y apenas acaba de conocer a Moreno; no creo que esté consciente, cierto? agh!! ya no se ni qué pensar.

-Se parece a Marissa- suelta de repente Moreno sacándome de mis pensamientos.

-Cómo?- me hago el estúpido.

-Dije que tu hijo se parece a Marissa- repite el mexicano.

-Si, gracias. Lo se- respondo cortante.

Moreno nota mi estado y recuesta a Jayden de nuevo en el sofá. -Sé que el que yo esté aquí te incomoda. Pero de perdida puedes ser un poco discreto- pide el jugador mexicano con algo de enfado.

-No me incomodaría tanto si no le hubieras traído esas flores a mi esposa!- suelto y oimos como abren la puerta principal.

Es ella.

Después de todo lo que hemos pasado, al fin la vuelvo a ver en persona.

Mi esposa.