Soy Tu Dueño |Jungkook Y T/N |

Capítulo 24 |Disculpa aceptada|

JUNGKOOK POV

―Esos gritos ―miró hacía la puerta de ma cocina ―vienen de la habitacion de visitas.

―Nana, ya le dije que eso no es nada. Tal vez está escuchando mal ―negué.

―No, yo escuche bien ―afirmó. Antes de que pudiese tomarla salió casi corriendo hacia la habitación de visitas, corrí detrás de ella pero era tarde cuando abrió con fuerza la puerta.

Joder. No.

―¿Pero que es esto? ―exclamó. Llegué rápido y ahí estaba la mocosa llorando y viendo como perro maltratado.

―Señora ayudeme ―pidió llorando.

―No es nada, nana ―negué.

―¡Ayudeme! ¡No le crea! ―empezó a gritar. Intenté sacar a Hyo de allí pero ella se alejó más hacia allá.

―¡Jeon Jungkook! ¡¿Que es todo esto?! ¿Quién es ella? ―pregunto alterada.

―No es nadie ―la tomé de los hombros como pude y la saque de allí. Ma chica siguió gritando pero tuve que cerrar con llave y meterla al bolsillo, Hyo empezó a pedir explicaciones tal y como no quería que pasará.

Ignorando todo lo que acababa de pasar camine hacia el patio para poder salir de allí, Hyo venía caminando detrás de mi gritando y pidiendo explicaciones. Suspire y trate de aguantarla pero no pude, me voltee y grite:

―¡¿Por qué me grita?! ¡Usted ni siquiera es mi mamá! ―solté enojado.

Hyo abrió sus ojos sorprendida y abrió la boca para decir algo pero nada salía de allí, entonces me di cuenta de que la había cagado, de que era un completo estúpido y mal agradecido. Pase mis manos por mi cabello ¿como pude decirle algo así? ¡ella fue la que me crió como a un hijo!

―Jung...Jungkook ―tartamudeo mi nombre. Ni siquiera quería voltear a ver como estaba su rostro, sólo con escucharla podía imaginar.

―Nana...―murmure y me voltee. Mi corazón se estrelló al ver su rostro, lleno de nostalgia, tristeza, engaño, sus ojos cristalinos. Mierda ―Nana, debería tomarse unas vacaciones ―suspire ―y espero que lo que vio no salga de su boca.

―¿En qué te has convertido, mi niño? ―me observó con pena y una lágrimas abandonaron sus ojos.

―Este es el nuevo Jungkook, el que siempre debió ser así. ―Dije seco ―déjeme sólo.

―Si es lo que quieres, bien ―limpio sus lágrimas ―y sobre lo que vi...No diré nada, te amo con mi alma y no quiero que nada te pase pero por favor piensa bien en lo que estás haciendo ―suspiro ―si me necesitas sólo llámame, siempre voy a estar para ti.

Le di la espalda y sentí sus pasos alejarse. Verifique que ya no estuviera y pegue un grito lleno de frustración, esa maldita mocosa era la culpable de todo esto ¡ella y nadie más! Por su culpa me llene de ira y le grite todas esas cosas a la única mujer que considero y siempre consideraré como una única madre, aún me crió a pesar de no ser su hijo biológico sino sólo el niño de su jefe.

No la ina golpear pero si la daría un castigo hasta que se me diera la gana, cuando me calme volví a entrar a la habitación y me acosté a dormir, fue una lucha poder conciliar el sueño debido a sus gritos pero lo hice.

(...)

Hoy era martes y me encontraba en mi oficina arreglando algunos papeles, de repente la mocosa vino a mi mente y abrí los ojos, la había olvidado por completo estos dos días...quizás ya estaba muerta por hambre, sed y frío, rogaba porque no ya que la habitación quedará oliendo a horrible y tendré que mudarme de nuevo. Estos días los había pasado fuera de casa, tengo un departamento al lado de la empresa, hay más allí ya que soy tan buen jefe que los trabajadores que no puede pagar un arriendo demasiado costoso en la zona céntrica les ofrezco algunos, pocos se ganan ese privilegio. Me aman, me catalogan como uno de los mejores empresarios de toda Corea y probablemente Asia en algunos años.