࿐ ONE SHOTS; DRAGÓN BALL | LIBRO 1

【 Mirai Trunks 】

Tu Nombre

—¡¿Acaso estás loca?!

—No me grites idiota —regañe a Trunks al golpear su cabeza con mi mano. —Y deberías dejar de insultarme, digo... salve tu maldito trasero... otra vez.

—Black casi te mata por ser tan estúpida. ¡¿Qué demonios estabas pensado?! —me grito de nuevo y como única respuesta de mi parte le di una bofetada que hizo que por fin se cayara.

—Y a ti que demonios te importa si el estúpido pelos locos me destruye —reitere molesta, dando la vuelta dispuesta a irme de ahí. —No soy tu adorada Mai.

Empecé a caminar pero me detuve al sentirlo sujetar mi brazo para evitar mi huida.

—No, ella no hubiera hecho algo tan estúpido.

—Y sigues diciendo que fue una estupidez. Tu existencia es una maldita estupidez, Trunks —me solté de su agarre y me gire para poder verlo a los ojos. —Tienes razón, debí dejar que te matará.

—Gracias por salvarme —susurro desviando la mirada a algún punto detrás de mi antes de empezar a acercarse a mí. —Gracias, _______.

Me abrazo. Sus brazos rodearon mi cintura y su rostro se hundió en mi cuello. Trate de apartarlo pero me fue imposible por que ahora si parecía estar usando su fuerza de sayajin.

—Sueltame o voy a golpearte, Trunks —sentencie pero el me ignoro, por el contrario hasta me acerco más a su cuerpo y cuando lo vi levantar el rostro creí que se apartaria pero para mi sorpresa terminó uniendo nuestros labios.

Me resistí al principio por que según tenía entendido me habia terminado por la hermosa chica de cabello negro que si sabía disparar un arma pero después de unos segundo abrace su cuello y correspondi al beso.

Cuando nos separamos sus ojos azules estaban fijos sobre los míos mientras sonreía.

—Te amo —suspire ante su repentina confesión pero antes de que pudiera responder la voz de Black se hizo presente.

—Lamento arruinar su momento pero debo matarlos a ambos —habló con una tristeza burlona. —Siento decir que su existencia es una molestia latente pata mi.

La palma de su mano apunto en nuestra dirección mientras lanzaba una esfera brillante en nuestra dirección que Trunks al cargarme en brazos logró esquivar. Me aparte de él y lo avente un poco mientras sonreía divertida.

—Anda, ve matalo. Yo te espero aquí “lejos de el peligro” —ironice, el de ojos azules me sonrió mientras desenfundaba su espada.

—Si salimos de esta tú y yo tendremos una cita —decreto viéndome.

Afirme con la cabeza y él se lanzó contra Black para empezar a pelear dejándome recargada contra la pared de algún edificio destruido mientras mi pierna sangraba. Si, Trunks no se había dado cuenta de que tenía una herida por haberlo salvado.