25: Finge que no me conociste

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-No sabia que recibiríamos visitas, iré a alistarme ve abriendo la puerta por favor-

Izuku subió las escaleras para dirigirse a su habitación, por lo que abrí la puerta, y justamente ella estaba ahí, Himiko Toga, mi prometida de hace ya dos años, la razón por la cual me fui de casa de mis padres, no quería volver a verla, y mucho menos ahora.

-Katsuki¡¡¡ que gusto verte¡-

Toga se estaba inclinando hacia mi seguramente para abrazarme, pero antes de que pudiera hacerlo cerré la puerta de entrada y le eche llave.

-Katsuki¡ es de mala educación cerrarle la puerta en la cara a una dama que viajo desde muy lejos solo para verte¡¡¡-

-Que es todo este escandalo? quien toco la puerta?-

En ese momento Izuku bajaba de la escalera con un vestido rosa pálido puesto y botas caoba.

-Nadie importante, de seguro solo fue un gato con su cola, vamos arriba-

-Que gracioso Kat, no hay que dejar a fuera a los invitados-

Izuku abrió la puerta, y yo salí con el, y fue cuando mire por el rabillo del ojo como una bellaca intentaba entrar a mi casa por la ventana del salón, que al vernos a fuera irguió su cuerpo como si no la hubiéramos visto intentar allanar nuestra casa.

-Mucho gusto soy Himiko Toga, y vengo a por Katsuki Bakugo-

Eso era lo que mas me daba miedo de Toga, a veces cuando trataba de portarse como una persona normal, terminaba dando mas miedo que lo habitual.

-El gusto es mío, soy Todoroki Izuki, pase, es bienvenida-

-Gracias-

Toga se abalanzo hacia mi persona y comenzó a restregar su cabeza en mi pecho como si fuera un gato.

-Katsuki¡¡ eres malo¡ me dejaste afuera esperando¡-

-El punto era de que no entraras a mi casa-

-Ni que tu fueras el chanchito y yo el lobo feroz-

Por supuesto que no, ella no era un lobo feroz, ella no solo te comería hasta los intestinos solo por placer.

-Bueno, la sirvienta Jirou tomo el día libre pero, desean algo para beber? te, manzanilla? agua con limón?-

-Tiene sangre de pato?-

-Lo siento pero no, pero tengo un te rojo que le puede encantar-

-Entonces prepáreme uno por favor-

Luego de que Toga que bebiese el te salimos al jardín, quería tenerla lo mas alejada posible de Izuku.

-Y Katsuki? no me preguntaras como me fue en Francia?-

-No es necesario por que se que me lo terminaras diciendo-

-Que malo, pero si, al final fue muy aburrido, un montón de chicos trataron de coquetearme, pero claro yo solo amo a Katsuki, incluso fui a muchas tiendas de vestidos de novia, y visite a varias modistas, ya se cual quiero que sea el vestido de nuestra boda-

-No crees que estas llevando las cosas demasiado rápido? recién acabas de volver de Francia y ya estas pensando en una boda?-

-Katsuki-

En ese momento, sentí miedo, después de todo, el autismo de Toga no era algo que se debía de juzgar a la ligera.

-Tu y yo juramos casarnos cuando éramos pequeños, yo tenia seis y tu ocho, dijiste que te casarías conmigo cuando fuera mayor, cuando tenias quince y yo trece, nos comprometimos cuando yo tenia diecinueve y tu veintiuno , prometiste casarte conmigo cuando volviera de mis estudios en Francia, ahora tengo veintiuno y tu veintitrés, tienes que cumplir una promesa de hace quince años¡-

Y Toga había lanzado su taza de te vacía, ahora la taza se encontraba en medio de la pileta rota, Jirou me mataría.

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-Bueno, nos vemos mañana Katsuki, no te libraras tan fácil de mi-

El carruaje ya había comenzado a avanzar dejándome atrás, entre a casa, lo único que esperaba era que Izuku me abrazara fuertemente y dormir con el olor de sus cabellos entre mis .

-Kat, quiero saber quien era esa señorita?-

Querido Eijirou, por favor, en mi funeral quiero rosas negras.

-Es una amiga....-

-Amiga?-

Izuku se me acerco y me abrazo por el cuello, me acerco a su cara, creí que me besaría, estuve a punto de cogerle de la cintura pero de pronto el susurro.

-Por mentir, hoy no duermes en mi habitación-

Y ahí se dio cuenta que la había cagado cuando Izuku se separo de el con lagrimas en los ojos y le lanzo la carta.

-Si vas a casarte con ella, hazlo, vete, que si no te vas tu me voy yo-

Acto seguido quise seguir a Izuku, pero este ya subía las escaleras rápidamente a pesar de estar con tacones, el se queda intacto en ese lugar, lo peor de todo, era que su antigua habitación se la dieron a Jirou para que se sintiera mas cómoda, ahora le tocaría dormir en el sofá que hace poco habían quedado en cambiar.

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-Izuku te amo-

-Esto solo fue una aventura de acuerdo? encontrare a alguien mas, y si no, hare una nueva vida-

-No puedo hacer esto-

-Solo finge que nunca me conociste, será mas fácil.

-No será fácil, si no te tengo a mi lado-

-Katsuki, no me lo hagas mas difícil, por favor....-

-Bakugo, ya es hora-

-Suerte Kat, adiós, tengo un tren que tomar-

Izuku se fue, no solo de la capilla, si no de mi vida, y no podia salir corriendo tras de el, tenia que ir al altar a esperar a Toga, con lagrimas en los ojos, me derrumbe en ese instante, como podría olvidar al único amor de mi vida y casarme con una desquiciada que me quitara los órganos y el corazón para comérselos.

3/3

Hola, bueno no queria este final pero, me encuentro corta de inspiracion y bueno, se me ocurrio esto, gracias por leer hasta aqui, los quiero mucho, adios¡¡.

Gracias por leer, votar y comentar, espero verlos una vez mas~

La conversión del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora