Lágrima de luna

32

Suga:

Al llegar a la universidad, me doy cuenta de que, como siempre Ariana ya ha llegado; pero esta vez no se encuentra escribiendo como de costumbre, tiene la mirada clavada en la ventana.

-¿Qué hay afuera?- pregunto mientras me acerco a ella.

-Nada... solo estaba pensando- responde, al tiempo que me mira y sonríe, pero yo no puedo evitar percatarme de que sus ojos están hinchados, y además tiene una expresión extraña, su mirada denota una dureza que jamás había visto en ella.

-¿Qué pensabas?-

-En todo y en nada a la vez. -

"Buena respuesta" pienso, con las cejas ligeramente arqueadas; veo que no siempre se necesita mentir para ocultar la verdad -¿Sabes que Jimin ya está en su casa?- pregunto, para cambiar de tema.

-Sí, me envió un mensaje hace un rato- responde asintiendo.

-Creo que debería haberse quedado más tiempo...- comienzo, pero Ariana me interrumpe.

-Ciertamente habría sido lo ideal, pero había pacientes más graves que necesitaban una cama... Los hospitales no se dieron abasto anoche, ni ellos ni la policía; demasiadas personas fueron atacadas; la mayoría de ellas no sobrevivió. -

-Lo escuché- comento con seriedad "¿Qué va a pasar con los que sobrevivieron?" pregunto para mis adentros, ¿El espectro los asesinará o los forzará a irse con él? -¿Qué dice la policía?-

-Que trabajan en ello; pero la realidad es que no creo que tengan ni idea de lo que está pasando. - Responde Ariana negando con la cabeza -Volviendo a Jimin, su mamá es enfermera, sabrá cuidar de él... ¿Qué te ocurrió?- pregunta, señalando la venda que cubre el corte que me hice ayer para pactar con Jimin.

"Demonios" -Anoche quise darle un poco de agua a Jimin pero tropecé, y para no caer encima de él hice un movimiento que terminó conmigo en el suelo y el vaso hecho añicos en mi mano. Nada grave- explico con aire despreocupado y ella asiente.

-Me alegra que no sea nada grave, aun así no debes olvidar limpiarla y cambiar el vendaje seguido o podría infectarse- responde sonriendo y yo hago lo mismo.

-No te preocupes, lo haré... ¿Te encuentras bien?-

-Mi mejor amigo casi se muere... Estoy terminando de asimilarlo, creo- contesta con un suspiro, yo lanzo otro al darme cuenta de que me está mintiendo; además esa expresión en su mirada me preocupa.

"¿Qué está pasando por tu cabeza, Jung Ariana?"

***

-Centro de Ciencias- murmuro cuando ingreso en uno de los centros que está al otro lado del campus de la universidad, es increíble como no hay ni un alma en los pasillos "Parece más metódico todo aquí que en el centro de artes" pienso, y al doblar en uno de los pasillos cierro los ojos y dejo que el olor que estaba buscando inunde mis fosas nasales -Te tengo. - Susurro, al tiempo que abro los ojos y sonrío con satisfacción, para luego comenzar a caminar; al llegar a otra intersección, doblo la esquina y aguardo, no pasa mucho tiempo cuando escucho pasos acercarse, y luego de contar hasta cinco extiendo el brazo, sujeto al licántropo por el cuello de su camisa y lo estampo contra la pared.

-Hola- digo mientras lo tomo por el cuello y lo levanto del piso -; de verdad que no los entiendo, se creen muy listos y terminan engañados por maniobras tan simples como esta... ¡Ah! Espera, lo que pasa es que pensaste que con lo que pasó ayer no tendría cabeza para pensar con claridad ¿No?-

-¿Y qué... que ha-harás... matarme a... med-io pas... pasillo?- pregunta el licántropo y yo suelto una risa corta mientras le muestro mis ojos lobunos.