41

1.2K 106 321
                                    

Espectro:

Me encuentro sentado afuera de casa, disfrutando de la suave briza que está haciendo desde la mañana.

"Me pregunto si ya habrán encontrado su cuerpo" pienso, sonriendo ampliamente ante el recuerdo del sonido de mis garras atravesando el estómago de Jung Daniel; no las clavé demasiado profundo para que no se desangrara rápido, quería que tuviera una muerte lenta, agonizante... —¿Qué dirá tu pequeña hermana cuando se entere de que ahora está completamente sola? ¿La consolaría saber que, a pesar de no estar del todo bien, diste buena pelea?— pregunto en voz alta y mi sonrisa no hace más que ampliarse; la muerte de su hermano será un golpe bastante duro para Ariana, la hará más vulnerable, más descuidada...

—Señor, los cambia-pieles están aquí— anuncia Jaehyun, devolviéndome a la realidad; en la madrugada que regresé, les dije a todos mis reclutas licántropos lo que había pasado; así como también fui informado sobre nuestras bajas, nada sorprendente, puesto que ya sabía que los cazadores los estarían esperando. Ciertamente yo esperaba quince niños nuevos, pero el hecho de haber quitado del medio a uno de los mejores cazadores de la orden me puso de muy buen humor, así que no castigué a los licántropos que lograron volver de la batalla... Aunque no puedo decir que los cambia-pieles tendrán la misma suerte.

—Gracias Jaehyun. Ahora, necesito que vayas a buscar a Deokhwa; tengo que hacerle un par de preguntas sobre anoche. El resto, quédense. — Indico, y mientras que el castaño se marcha, los otros cinco licántropos presentes se sitúan detrás de los cambia-pieles, mirándolos con emoción contenida. Por mi parte, tomo una gran bocanada de aire, para después mirarlos con tranquilidad —Un camafeo— les suelto —; confundieron un camafeo con el contenedor de Lágrima de luna, es la segunda vez que me fallan...—

—Pero señor— me interrumpe Daehwi sin poder contenerse —, el camafeo era bastante grueso, fácilmente podría albergar una pequeña semi...—

—Ya se les había informado que además existe un poco de extracto de la última flor que hubo— lo corto con seriedad —¿Es un camafeo apto para contener una sustancia líquida?— inquiero con una ceja arqueada, y el pelirrojo solo atina a agachar la mirada —¿Lo es?— insisto.

—No señor— responde al fin.

—Exacto, no lo es. — Digo con obviedad —La visita a casa de ese chico fue un éxito parcial; lo asesiné y ahora ya no estorba, es por eso que no los mataré— comienzo en tono solemne —, sin embargo, de momento Lágrima de luna sigue estando fuera de mi alcance; eso amerita un castigo, un castigo que les recuerde que si vuelven a fallarme, no habrá otra oportunidad que dar...—

—Señor... yo lo ayudé anoche— dice un delgado cambia-pieles con voz temblorosa, y yo solo atino a sonreír ligeramente mientras me acerco hacia él.

—Es cierto, Kwan, si tú no hubieras quitado la maceta de acónito del camino yo no habría podido entrar en casa de Daniel, y si no la hubieras vuelto a colocar después de que entré, él habría sospechado que algo andaba mal. Fuiste bastante útil ciertamente— digo asintiendo, y el chico frente a mí suelta un ligero suspiro de alivio —; pero lamentablemente también me aseguraste que el chico tenía Lágrima de luna. — Le suelto con pesar, para después mirar a los licántropos detrás de ellos y asentir; acto seguido, todos se transforman y se abalanzan sobre los cambia-pieles, que comienzan a lanzar chillidos de dolor y de terror —Recuerden, no los maten, todavía pueden ser útiles. — Indico, para luego darme la media vuelta y mirar fijamente a Jaehyun y Deokhwa, que han estado presenciando la escena desde hace algunos minutos.

—¿Me buscaba?— pregunta el castaño, agachando la mirada.

—Sí, tengo un par de preguntas para ti. — Respondo con serenidad, para después mirar a Jaehyun —Únete a la fiesta, desquita lo que no pudiste hacerle a los cazadores anoche—

Lágrima de lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora