Lágrima de luna

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Espectro:

Gruñidos furiosos llenan el ambiente mientras yo camino en círculos, observando al grupo que está practicando ahora; hace mucho que no entrenaba a prácticamente toda la manada junta, pero teniendo en cuenta que muchos no han alcanzado el nivel que necesito, era completamente necesario.

"Si quieres que algo salga bien, hazlo tú mismo..." comienzo para mis adentros, pero regreso bruscamente a la realidad al escuchar un chillido de dolor sobresalir entre todo el ruido de la batalla que tengo frente a mí, sonrío; las quejas de dolor se han hecho prácticamente extrañas desde que comencé a entrenar a los novatos yo, pero aún hay algunos rezagados —¡Dejen al joven quejumbroso y su oponente en el centro!— ordeno con voz enérgica, y automáticamente todos los licántropos se apartan, dejando ver a un licántropo de pelaje color negro que se está arrastrando por el suelo en su afán de alejarse de otro castaño que se le está acercando con ferocidad —¿Qué está pasando?— inquiero con una ceja arqueada, y el licántropo castaño se detiene un momento, mientras que el otro regresa a su forma humana.

—M-maestro...— comienza con voz temblorosa —Me... me...—

—Sé que te dislocó la pierna, lo que no entiendo es por qué eso es impedimento para que sigas peleando— lo corto con tranquilidad —; ya te he enseñado qué hacer. A estas alturas una pierna dislocada no debería detenerte... Josué, ¿Algo qué decir?— inquiero mirando al licántropo castaño, que regresa a su forma humana y le dedica al pequeño una sonrisa condescendiente.

—Cualquiera diría que tienes miedo de explotar todo tu poder—

—Yo no...— trata de defenderse el chico, pero él no lo deja terminar.

—A decir verdad, parece que todos lo tienen... Dan vergüenza— les suelta con serenidad —; cuando nosotros llevábamos el mismo tiempo que ustedes tienen aquí, ya éramos aptos para llevar a cabo misiones del rango de la de Dai. — Concluye, mirando a Kenji para que continúe.

—Y no solo eso, sino que a esas alturas ya pertenecíamos a la jerarquía alta de la manada, algo de lo que al parecer, ustedes no están ni cerca. — Dice éste, y luego de observar a todos los novatos, esboza una sutil sonrisa maliciosa e intercambia una mirada con Josué —Miren a los chicos que están a su lado, obsérvenlos con atención; no quiero predisponerlos, pero pronto se necesitarán más líderes de escuadrón para diferentes misiones, ¿Qué es lo que prefieren? ¿Seguir o que los sigan? Si siguen como van, alguno de sus compañeros podría terminar dándoles órdenes...—

—Preferiría morir antes de seguir a este mentecato— lo corta un chico pelinegro, situado en medio de los novatos y apuntando a un chico castaño que está junto a él.

—Ja, tú no podrías ser líder ni de una manda de perros, antes me entrego a los cazadores que seguirte, patético imbécil...— replica el muchacho, seguido de todos los pequeños, que poco a poco están comenzando a alzar la voz para protestar e insultarse entre ellos.

"Se necesita únicamente un cerillo, para detonar toda una locación de pólvora" pienso satisfecho —Bien hecho muchachos— les digo mentalmente a Josué y Kenji, pero antes de que yo pueda hablar, una voz sobresale de entre las demás.

—... Lo patético sería tener a Kangmin de líder, no puede lidiar ni siquiera con el dolor de una pierna dislocada...—

—¡Espera a que me ponga de pie y te voy a dar tu merecido!— exclama el muchacho con ferocidad, provocando que yo suelte una pequeña risa.

—¡¿Quieren pertenecer a la élite de la manada?!— digo con voz potente, y luego de que todos los novatos lanzan gritos de afirmación, esbozo una media sonrisa —¡Entonces demuéstrenlo!— ordeno, y para mi grata sorpresa el primero en reaccionar es Kangmin, que reprimiendo un quejido se reacomoda la pierna y se le echa encima a Josué, que suelta una carcajada y lo recibe sin ningún problema. Finalmente toda mi manada ha alcanzado el punto máximo para explotar sus habilidades.