49

788 86 188
                                    

Espectro:

Pasan de las tres de la mañana, y dos de mis mejores reclutas aun no vuelven.

—Son prácticamente los únicos que faltan, ¿Por qué no han regresado?— farfullo en voz baja mientras camino de un lado a otro del estudio.

—Maestro—

—Deokhwa, ¿Sabes algo?—

—Los encontramos, pero...—

—¿Pero?— inquiero, deteniéndome finalmente y posando la vista en el chico, que inmediatamente agacha la cabeza.

—Están muertos. — Responde finalmente, y yo solo atino a apretar la mandíbula, ¿Cómo que están muertos?

—Muéstrame. —

***

—No... ¡NOOOO!— grito con furia contenida cuando, al llegar a la cabaña en la que vivía Lee Daehyun, me encuentro con el cadáver de Seongjin; con excepción de la cara, quien fue mi mano derecha se encuentra completamente mutilado, y tiene sobre él una pequeña flor de acónito, obra de Jin sin duda... ¿Cómo es posible que ese lobo tan débil haya hecho esto? —¿Y Jaehyun?— pregunto, al tiempo que me vuelvo bruscamente a hacia Deokhwa.

—En el río... Kenji hyung y Hyunjin lo encontraron— responde el castaño, comenzando a trotar detrás de mí en cuanto yo comienzo a dirigirme hacia el lugar; la sangre hierve por mis venas, cuando al llegar me encuentro con el cuerpo inerte de Jaehyun... y el inconfundible olor de Min Yoongi. Al verme, tanto Hyunjin como Kenji se arrodillan.

—Fue Min sin duda— se aventura a murmurar Kenji, que parece estar tan impresionado como lo muestra la expresión del cadáver que tengo enfrente.

—No me digas cosas obvias. — Le suelto, dándome la media vuelta y comenzando a caminar —Encárguense de los cadáveres. Tírenlos en la fosa, déjenlos pudrirse justo en donde están, cómanselos, no me interesa qué hagan con ellos, pero en media hora los quiero a todos reunidos en la casa...—

—¿No los sepultaremos maestro? Tenían un rango bastante al...— comienza Hyunjin, pero se interrumpe en cuanto yo llego hasta él y lo sujeto por la playera.

—¿Crees que un par de licántropos que no pudieron completar la simple tarea de aniquilar a alguien merecen ser sepultados con respeto?— le suelto enfadado —Para mí no. Hagan lo que les he dicho...— digo con firmeza, pero me interrumpo al detectar los olores de Jisung y Soobin acercándose —Más les vale que...—

—Daehwi viene de revisar lo que pasó en casa de Min... Park Jimin también mató a su atacante— anuncia el segundo con la mirada gacha en cuanto aparecen en mi campo de visión, provocando que yo cierre los ojos con fuerza y comience a respirar de forma profunda, tratando de no sucumbir a la rabia que siento en este momento.

—Bien, bien— murmuro, recuperando la serenidad de mi voz —. Cometí un error, lo admito. Debí haber aniquilado a Yoongi desde el principio, ahora parece que ha mejorado bastante... ¡Hagan lo que ordené y reúnan a toda la manada en la guarida! Kenji, ven conmigo— indico, comenzando a caminar de regreso a casa.

—Maestro, ¿Qué haremos con respecto a Min y su manada?— pregunta el muchacho mientras camina a mi lado.

—Por ahora nada. Implementaremos el plan B, y en vista de que Min y compañía han mejorado de forma bastante considerable ustedes también tienen que hacerlo, entrenarán cinco veces más duro que antes, y quien no pueda seguirles el paso no me va a servir de nada; necesito que los novatos comprendan que es matar o morir, y que tengan presente quién es el enemigo aquí. —

Lágrima de lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora