Capítulo 60

8.9K 1.1K 432
                                    

-Eso sí, buen punto.-hablo Diego.-¿Qué quiere este tipo con Vanya?.-preguntó y Allison ya se había escabullido.
-No sé.-levanté y bajé los hombros.
-¿Qué tal si preguntamos después de matarlo?.-propuso Cinco.

-Oye, mira, Voy a romper...-Diego miró a todas partes buscando a Allison y nosotros lo miramos con el ceño fruncido. Cinco tomó mi mano y miré a Diego sonriendo mientras decía.-¿Sabes qué? Sería bueno que la gente siguiera...-Cinco me dio un apretón de manos y di unas palmadas en el hombro de Diego antes de desaparecer de su vista.

Cinco y yo estábamos dentro.
Iba a caminar pero el pecho de Cinco interrumpió mi camino.
-Lo de Vanya.-comenzó pero yo lo interrumpí.

-Fue hace más de 45 años.-alcé una ceja y él asintió sabiendo que lo entendía, esperen, ¡no!.
Salía con las dos.
-Espera un momento.-dije ahora yo cuando el comenzó a caminar.-¿Por qué estabas saliendo con las dos al mismo tiempo Número Cinco?.-mi voz cambió de la típica voz dulce a una más grave y acusatoria.

Un estruendo en una de las puertas llamó nuestra atención.
-Te salvaste.-dije por lo bajo y caminamos juntos para ver lo que había sucedido.

La preciosa escena de Diego Hargreeves sobre el suelo cubierto con una ligera capa de vidrios rotos.

-Sutil.-habló Allison
-¿Sabes? La puerta estaba abierta.-anunció Cinco.
-Si pues mi modo funciona bien.-dijo con pesadez y de la nada sentí una presión en los labios cuando nuestros hermanos se habían ido.

Unas manos en mi cintura me apegaron al cuerpo de Cinco y una mano en mi mejilla se posó suavemente haciendo sentir ese estúpido pero adorable cosquilleo cada vez que sentía cuando veía a Cinco sonreir o hacer cualquier otra cosa. Por falta de aire nos tuvimos que separar.

-Lo de Vanya no debo de explicarlo porque fue hace demasiado tiempo y lo único que debes de saber es que te amo a ti.-el frío Cinco había dicho esas palabras sin titubeos.
Sonreí al instante y lo volví a besar pero Cinco guió a sus manos un poco más abajo de la espalda baja lo que me hizo abrir los ojos de golpe durante el beso y apartarlo un poco.

-Vamos _____, ya somos grandes.-sonrió maliciosamente y mis mejillas fueron tomando ese característico color rosa-rojizo.
-Pero...-no pude decir nada ya que las manos de Cinco me volvieron a aprisionar y sus labios volvieron a chocar con los míos.

Parecía de verdad una niña con mis actitudes y reacciones pero a Cinco parecía gustarle mi actitud inocente aunque fuera algo no planeado por mi. ¿Estoy de nuevo en cambios hormonales y pubertad?

¡Demonios!

Jaja regresé, K kreisi.

You're Not Better Than Me | Número 5 Y Tú. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora