You're Not Better Than Me | Número 5 Y Tú.

Capítulo 77

______ Hargreeves.

-Acabas de salvarme.-exclamó Diego abrazando a Klaus.
El edificio se agitaba frenéticamente y Diego miró hacia arriba.
-¡Mamá! ¡Mamá! ¡Sal de ahí!.-gritábamos los tres desesperados.

Mamá puso su mano sobre la ventana viéndonos.
-¡Iré por ti!.-gritó Diego y yo lo detuve.
-¡No, Diego, ya no puedes!.-le dije sosteniendo con ambas manos su cara. Diego me miró con miedo en sus ojos y miramos a mamá.

Nos mandó un beso por último, y el edifico se derrumbó por completo, Diego y Klaus me abrazaron para que no me pasara nada. Cuando todo pasó, Diego ágilmente se levantó y comenzó a gritar en busca de mamá, nos pidió ayuda para seguir su búsqueda, lo miré con tristeza.

-Diego, para, por favor.-tomé su mano con un inmenso dolor en mi pecho por verlo así tan vulnerable.
-Suéltame, ¿qué haces?.-se intentó soltar de mi agarre pero no pude yo que lo jalé con mucha fuerza hacia mi levantándolo.

-Para, ya no está.-me apoyó Klaus.-se ha ido, ¿si? Ella...-soltó un suspiró negando mientras lo veía a la cara.
-¿Qué quieres hacer? ¿Quieres... Huir de esto?.-hizo una pausa y Klaus negó.-no. ¿Qué hay de Pogo?.-lo miró con seriedad.

Klaus estaba apunto de contestar pero Luther llegó caminando entre los escombros.

-No sobrevivió.-soltó sin siquiera prepararnos ni un poco para la noticia.
-¿Qué?.-exclamó Diego.
-Vanya lo mató.-respondió con toda seguridad.

-Pero Vanya no...-trató de justificarla, yo tampoco lo creía, podía matarnos a todos nosotros pero, ¿Pogo?, él no había hecho nada más que querernos y protegernos.

-Lo vi.-asintió.-justo antes de salir.

-Mamá. Ahora Pogo.-Diego miró al suelo, o más bien a lo que quedaba de nuestra casa. Se sentó y yo me quedé atónita.

-¡Chicos!.-gritó una persona a nuestro lado, sin embargo, no lo miré, no quería, de nuevo, me había dejado justo cuando tembló todo.-esto es, el apocalipsis sigue en pie. El mundo se acaba hoy.-aclaró y todos lo miraron, excepto yo.

-Pensé que dijiste que había acabado.-le cuestionó Luther.
-Me equivoqué, ¿si?.-solté una sonrisa irónica.-Este diario lo encontré en el futuro, el día que quedé atrapado.-giré a verlo un momento, por suerte, no me miraba a mi, notaría mi odio hacia él ahora.-El titular no ha cambiado.-nos mostró el periódico que sostenía.

-Eso no significa nada. El tiempo pudo alterarse desde que ese diario salió esta mañana.-dijo Diego de una manera obvia.

-No estas escuchándome.-cerró sus ojos fuertemente.-Cuando lo encontré, supuse que este lugar había caído con todo lo demás. Pero aquí estamos, la luna aún brilla, la tierra está entera.-miró hacia el cielo y luego volvió a mirar a todos, cuando llegó a mi desvié mi mirada a otro lugar.-pero la academia no.-Klaus de acercó y le arrebató el periódico.

-Estoy confundido.-esbozó Klaus mirando las letras impresas en el pedazo de papel.
-Escúchame, idiota. Vanya destruye la academia antes del apocalipsis. Creí que Jenkins era la causa, pero sólo era el detonante.-deducía las cosas muy bien, debió hacerlo mientras nosotros estábamos muy ocupados en tratar de sobrevivir mientras que él estaba haciendo otra cosa.-Vanya es la bomba. Vanya causa el apocalipsis.-todos estábamos sorprendidos, unos más que otros, aunque yo ya lo veía venir.

-Debemos hallarla.-el ruido de un helicóptero y una luz que se posó sobre nosotros se hizo presente junto con sirenas policiales.
-Debemos irnos, ahora.-grité.-nos vemos en el Superestrella.-iba a caminar para irme junto con Klaus, pero obviamente una mano me tomó de la cintura y no tuve que verlo para saber quién era.

Él ya me había teletransportado a los bolos, bueno, al baño de los bolos.
-Mierda, mierda, suéltame.-lo empujé e hizo doler mi herida del estómago, ya que hice más fuerza de la que en verdad necesitaba. Sentí como cerró la puerta con seguro, y después habló.

-______.-me miraba serio. No lo miré a la cara, simplemente no podía, él sabía que caería de nuevo.
-Ellos llegarán.-dije lo más seca que pude y le di una fugaz mirada.
-Tenemos más de cinco minutos antes de que ellos lleguen, nosotros nos teletransportamos, ellos tienen que caminar.-sonrió.

-¿Y qué quieres?.-decidí mirarlo pero sus ojos me atraparon.
-Me fui, porque tenía que hacer algo.-explicó.
-¿Ah, si?.-lo miré enojada.-ignoraste que toda la academia tembló y te fuiste.-le reclamé y le di un ligero empujón.
-¡Creí que eran los demás tratando de intentar algo para salvar al apocalipsis!.-me tomó de los hombros bruscamente.
-¡Me dejaste!.-quité sus manos de mis hombros y me alejé.

-Tenía que hacer algo _____, entiéndeme por favor.-suplicó pero no se la dejaría fácil.
-No, entiéndeme tú a mi Cinco, estoy harta.-tenía que soltar todo lo que tenía para decirle.-¡Harta! De que te vayas cuando se te da la gana, sin explicaciones, y yo como estúpida perdonándote siempre.-lo apunté acusatoriamente, me recargué sobre el lavabo del baño dándole la espalda.

Entonces hizo algo que jamás imaginé que haría, al menos, no así.

Me tomó del brazo haciendo que me girara, y me tomó por mi mandíbula, acercándome a él para después besarme, no de una manera dulce, un poco brusca por el ambiente de enojo que nos rodeaba, le seguí el beso y con su otra mano libre tomó mi cintura apegándome a él.

Cuando sintió que respondía, cambió la mano que sostenía mi mandíbula, ahora tomando la parte de atrás de mi cabeza intensificando el beso, yo con mis manos alcancé a rodear su cuello atrayéndolo también, después de unos segundos lo separé de mi.

-Entiendo, lo entiendo perfectamente _______, y prometo recompensarte cada maldito segundo cuando todo esto pase.-rozó su nariz con la mía.
-Eso espero.-me dió un corto beso y me despegué completamente de él para después abrir la puerta y salir.