KakaShizu: Un Nuevo Comienzo

Capítulo 22: ¡Kakashi está Enojado!

Y así, todo volvió a la normalidad. O bueno, casi, al menos Shizune no estaba triste. Tal vez porque el triste final de la novela que leyó ya no ocupaba su mente, sino, cierto Hokage y cierta actitud de este.

—Esto es... incomodo... —se dijo la asistente. La oficina volvía a estar tensa, y no por Shizune, sino, por Kakashi.

Miró a Shikamaru, que estaba en su lugar trabajando en silencio con un gran chinchón en la cabeza, y luego a Kakashi, el cual pasaba con fuerza el sello en los documentos.

—¡Pam! ¡Pam!

Casi pareciera que lo hacía a propósito como para que no lo molestaran.

—Está de mal humor... —chilló internamente Shizune, era la primera vez que veía a ese hombre relajado tan molesto.

—¡Arg! ¡¿Qué se supone que haga?! —comenzaba a angustiarse, no estaba acostumbrada a trabajar en un ambiente así.

—Shizune —le habló Shikamaru, sacándola de sus pensamientos.

—¡Ah! ¿Ya terminaste?

—Sí, ahora mismo tengo una misión.

—Uh, está bien.

—Bien. Entonces me despido —dio aviso y dirigió su mirada al Hokage —. Adiós, Kakashi sensei.

—Que te vaya bien en tu misión ~ —respondió con una sonrisa que daba miedo por lo rígida que era ¡Aun no lo perdonaba por el bochorno que había pasado con su asistente!

—Este hombre. Solo nos equivocamos —se quejó —. Qué molesto.

Salió de la oficina, pero cuando llegaba a la entrada del edificio una voz lo detuvo.

—¡Shikamaru!

Era Shizune corriendo hacia él.

—¡Lamento haberlos preocupado! ¡No fue mi intención! —se disculpó con una reverencia propio de ella.

—¡N-No hace falta que te disculpes! —sin duda, al recibir ese trato de alguien mayor que él, lo ponía en una situación complicada.

—Lo siento mucho. Y para aclarar estoy bien, fue por una pequeñez que anduve rara toda la mañana.

—Bueno, es bueno saber que no fue nada malo —se alegró el joven Nara —. Él también estuvo preocupado —le comentó.

—Uh, lo sé. Pero...

—Uh, lo entiendo...

Para los dos era algo nuevo ver ese lado de Kakashi, uno molesto y enojado, casi rozando a un berrinche.

—Le debo una disculpa. Pero, es tan difícil... —Shizune no se veía capaz de acercarse a él, y eso, la angustiaba.

—¡Dios, son iguales...! —Shikamaru se sorprendió al ver esa actitud, ¡era la misma que la de Kakashi!

Y antes de que Shizune saliera con ideas absurdas para no hablar con el Hokage, Shikamaru se adelantó.

—¡Shizune, Kakashi sensei te aprecia! ¡Estoy seguro que podrás hacer que deje de estar molesto!

Habló algo nervioso. El momento le recordaba mucho a la charla que había tenido con el Hokage.

—¿Eh? —ese comentario sorprendió a la asistente.

Shikamaru se daba cuenta que, al igual que el Hokage, Shizune no era consciente de la estima que se tenían.

—Qué molesto. Y pensar que ellos son los adultos.