"Lo que importa es el camino que recorrimos juntos, los recuerdos que creamos en esa oficina con nuestros seres queridos. No importa cómo termine esto, sino lo felices que fuimos juntos. Siempre estarán en mi memoria, todos y cada uno de los momento...
Y ahí estaban Kakashi, Mei y sus asistentes en esa amplia sala con vista de todo Kirigakure.
La Mizukage y el Hokage se encontraban sentados y enfrentados, y detrás de ellos estaban sus respectivos asistentes parados. Estaban los cuatro solos, los demás Kages no habían llegado y el silencio incomodo se hacía presente en la sala. Pero había algo que incomodaba aún más a Kakashi y eso era la sonrisa constante que le dedicaba la Mizukage.
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-Mizukage sama...no sea tan evidente...- regañaba internamente Ao a Mei.
-La Mizukage solo pone tenso a Kakashi sama - pensó preocupada Shizune. Aunque Kakashi lo aparentaba bien, él realmente estaba nervioso y Shizune lo sabía.
Kakashi trago saliva –a qué hora piensan presentarse los demás! – no habían señales de los demás Kages. Y el tiempo parecía pasar lentamente para su mala suerte.
Busco la mirada de su asistente. Y ella conecto con él –auxilio! – le comunico. Y ella le respondió. –Ud es el Hokage! converse con ella para matar el silencio! – acaso se comunicaban telepáticamente?
Kakashi era malo socializando- algo? que le puedo preguntar?! No se me ocurre nada! - se presionaba. Y Shizune lo observaba ahogándose –cualquier cosa! Hay miles de temas! Recuerde como cuando conversamos nosotros! – le daba su apoyo en silencio.
-Hokage sama...- lo llamo la Mizukage con su voz seductora tan característico de ella.
-si! – se tensó Kakashi.
-fu fu fu se ve muy nervioso.
-ja ja ja lo siento – se disculpó Kakashi apenado.
-Hokage sama. Me entere que se están hospedando en el Hotel Ran.
-hu, así es. – asintió Kakashi intentando seguir el ritmo la conversación. - es un hotel muy lindo.
-le contaron la historia de su edificación? – pregunto mientras lo veía muy fijamente.
-hu... si nos contaron. De que lleva el nombre de la esposa del dueño del hotel, el Sr Fukui.
-así es. El Sr Fukui es un buen amigo mío. Sin su apoyo Kirigakure no se hubiera recuperado tan rápido después de la guerra. –comento. –Hokage sama. Le puedo hacer una pregunta? - lo miro de una manera intensa, tanto que hasta Shizune se sentía intimidada también.
-hu, claro. - respondió cortésmente Kakashi.
-de qué color le toco su orquídea? – le pregunto. - es un regalo que le hacen a los huéspedes del hotel el primer día de su instancia. Me da curiosidad de saber qué color le toco.
Kakashi las había visto, eran hermosas. Estaban en un florero en la mesa de luz al lado de su amplia cama.
