KakaShizu: Un Nuevo Comienzo

Capitulo 83: Noche de Gala (Fin)

—Kakashi sama... —lo llamó mientras él corría hacia ella. Mientras caía y todo se volvía oscuro. Mientras cerraba los ojos y escuchaba su nombre.

—¡SHIZUNE!

Y antes de que pudiera tocar el suelo, el hombre que la acompañaba la sostuvo suavemente.

El grito de Kakashi llamo la atención de todos los presentes, volteando su mirada en la mujer que yacía en el suelo de los brazos de un hombre mientras otro la llamaba insistentemente.

—¡Shizune! ¡Shizune! ¡despierta! —la llamó intentando mantener el control, aunque resultaba difícil ¿Por qué se había desmayado si hace un instante se veía bien?

—Este lugar tiene habitaciones, será mejor llevarla a una. —el hombre levantó la vista viendo a Kakashi a los ojos.

—Hu —asintió.

Rápidamente el desconocido levanto a Shizune con delicadeza y comenzó a caminar indicando el camino. Los dos hombres cruzaron el salón llevándose la mirada curiosa de los invitados.

Y mientras lo seguía, un sentimiento de molestia se volvió a apoderar de Kakashi, no le gustaba como sostenía a su asistente. Ante sus ojos, ese hombre la sostenía con sumo cuidado, como si de algo preciado se tratase. Pero no dijo nada. Shizune aún estaba inconsciente, no podía dejar que esas emociones cegaran su juicio —Shizune es más importante — debía calmarse y mantener la mente fría.

Llevaron a Shizune a una habitación. Ahí los esperaba el personal que había abierto la puerta.

—Señor... —intento hablar uno de ellos pero fueron interrumpidos.

—Llamen a un doctor Matsumoto. ¡Deprisa! —ordenó el desconocido mientras se dirigía a la habitación.

—¡Sí, señor! —y se marcharon del lugar dejándolos solos.

El hombre recostó a Shizune en la cama esperando de que no fuera nada grave lo que tuviese.

—¿Cree que bebió mucho? —le preguntó a Kakashi. Ella tenía las mejillas rojas como si hubiera bebido mucho.

—No... —le respondió mientras se acercaba a ella. —No... ella no bebería hasta desfallecer en un evento importante. ¿Se le habrá bajado la presión? Tampoco, Shizune es muy saludable y comió muchos bocadillos dulces durante la fiesta... —Se puso al nivel de la cama apoyando una de sus rodillas y acaricio la mejilla de su asistente —¿fiebre? —noto que tenía la temperatura algo alta, se veía tan débil. — lo único que se me ocurre es que... la drogaron. —llegó a esa conclusión rápidamente.

El desconocido solo observaba en silencio la reacción del Hokage hacia su asistente.

De repente, entraron Mei y el Raikage a la habitación.

—¿Cómo está tu asistente? —preguntó Mei.

—Todavía no responde. —dijo sin voltearse a verlos

El Raikage vio a Kakashi inmerso en Shizune, dudaba si decirle la razón por la cual estaba ahí. Pero él y su asistente se lo habían pedido, así que solo le quedaba cumplir  —Kakashi. —lo llamó.

Kakashi se podía imaginar lo que estaba por decirle —¿el Sr Akira acaba de llegar?

—Si. ¿Que harás? —fue directo.

Kakashi no respondió. No sabía qué hacer. Por un lado, tenían la única esperanza para evitar la crisis en Konoha, y por otro, tenía a su asistente sin responder, posiblemente drogada. ¿Qué debía hacer? La presión, sus deberes y la razón comenzaron a hacer estragos en él; la respuesta era clara, debía ir con el Sr Akira. Entonces, ¿Por qué no podía responder a la pregunta del Raikage? ¿Por qué dudaba? —Shizune...—no quería dejarla sola. Ya la había dejado sola una vez, y se había expuesto al peligro. ¿Qué debía decidir? Pero también pensó en Konoha, las personas que viven en su aldea, aquellos que dependían de él como los orfanatos y los enfermos de los hospitales —¿Qué hago? —se preguntaba impotente ¿Debía escuchar a la razón o al corazón? ¿Debía pensar en sus deberes como Hokage o debía ser egoísta?