Capítulo 15

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* Un pequeñito regalo de navidad! Feliz Navidad!

El sábado llegué a casa al mediodía y mi padre me recibió con un fuerte abrazo. Me había echado de menos, solo era una semana pero creo que se estaba mentalizando de que muchos meses serían así. Yo le devolví el abrazo con ganas. Me había preparado una comida deliciosa y decidí sacar un tema que había evitado por un tiempo;

- Papá, ¿por qué no sales con nadie? No me gusta verte aquí solo siempre.

- No estoy solo, te tengo a ti, a tu abuela y tíos y muchos amigos.

- Lo sé pero no es lo mismo, ¿no te gustaría conocer a una mujer? ¿Compartir tu vida con alguien más? - Él sonrió.

- Quizás pero tengo el listón muy alto, ya lo sabes. - Sonreí. - Hablando de relaciones, ¿qué pasó con Jeff? Es un buen chaval.

- Ya hablamos de esto en verano, papá.

- Pero pensé que cuando volvierais a veros...

- No todas las relaciones son como la tuya y la de mamá. Además, él está con otra persona ahora así que...

- Ya...

- No te preocupes, estoy bien. - Asintió con la cabeza.

- Aun así, no dejes que el trabajo te absorba. Tu vida personal también es muy importante.

- Intentaré recordarlo. - Pareció darse por satisfecho con esta respuesta. - Hablando de mi vida personal, hoy tengo una cena con unos amigos. - Un buen eufemismo para la cena de hoy.

- Así me gusta.

Me había preparado la ropa y estaba echada en la cama mirando una serie. Cam me había dicho que estuviera a las 20:30 en el hotel El Centro y que dijera su nombre. Que pereza me daba esto, hacía más de ocho meses que no lo veía. Volver a aquello me parecía como si en todos estos meses no hubiese avanzado nada.

Intenté ser puntual pero sin llegar muy pronto, pero como siempre me había entretenido y al final había tenido que correr. Revisé mi maquillaje antes de bajar del taxi. El hotel tenía una entrada espaciosa con una alfombra roja. Me abrió la puerta y susurré un gracias, un poco sobrecogida por todo el protocolo. Llevaba un vestido elegante pero me sentía insegura. No sabía si era del todo apropiado. Me acerqué a recepción.

- Buenas tardes, me espera Ca... Connor Amery. Me dijo que preguntara aquí.

- Sí, le dejo la llave. - Fruncí el ceño. ¿Eso era todo? - Segunda planta, habitación 27. - Suspiré.

- Gracias.

Estaba empezando a ponerme nerviosa. Llegué en seguida a la habitación y piqué en la puerta. No contestó nadie. Puse los ojos al cielo y abrí la habitación. Había una pequeña salita con sillones y en otra salita adjunta una cama doble. Pero no veía a Cam por ahí. Había una ventana en la habitación con la salita y otra... no, era una terraza. Y ahí estaba la silueta de Cam. Él se giró al escucharme para después volver a mirar el horizonte.

- Te has retrasado 5 minutos. - Me dijo todavía sin mirarme.

- Siento disentir, he llegado al hotel a las 20:30 en punto que es en lo que habíamos quedado. - Mientras hablaba se había girado y me sonreía. - ¿No tenemos una cena?

- Todavía queda media hora. - Alcé una ceja, interrogante. - Tengo que contarte un par de cosas antes de ir. - Me apoyé en la barandilla a su lado.

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