Saudade

Capitulo 62: Una Navidad diferente

- No me acuerdo de la canción- se queja Martín de rodillas frente a ese tronco de madera con un pequeño palo en la mano

- ¿Te ayuda a cantarla mami vale?- propone Aitana- pero tenéis que dar vosotros también golpes o lo que cague nos lo llevamos Martín y yo- advierte a Luis y Laia que se sonríen resignados por la ilusión desmedida de la chica por las tradiciones navideñas- Caga tió- empieza a entonar la catalana- neules i torrons- continúa con ella Martín recordando al escucharla, esa canción que desea todo el año cantar- Sinó cagues ara ... cop de bastó!!!- terminan dando todos un golpe a ese tronco con cara, que parece tan divertido- ¿Creéis que habrá cagado?- les pregunta ilusionada Aitana acercando su rostro a la manta que lo cubre para ver si percibe algún ruido extraño que le haga desvelar el misterio

- Al menos debería...- responde entre risas Laia- Martín le ha dado de comer todas y cada una de las noches- recuerda como pasara lo que pasara el pequeño no desistía en esa labor

- ¡Venga! Quita la manta- le apremia

Puede que sean sus nervios o su temor a que ese tronco aún no haya cumplido su cometido, los que hacen que las pequeñas manos del niño levanten esa manta con sumo cuidado. Y es al lograr vislumbrar el brillo del papel de regalo cuando la emoción estalla en él

- ¡Hay regalos! ¡Hay regalos!- avisa previniéndoles de lo que ya ha visto dirigiendo su mirada cargada de ilusión hacia todos los mayores

- Venga ratón- le incita Laia que empieza a impacientarse

Y son esas palabras y la ayuda de Aitana para levantar la manta, lo que hacen que queden a la vista cuatro pequeños paquetes rodeados de un montón de chucherías

- Un buevo- se sorprende abalanzándose hacia uno de esos huevos de chocolate que prometen una sorpresa dentro

- Pero uno de esos regalos será tuyo ¿no?- le pregunta su padre intentando llamar su atención, ya que por más surrealista que parezca, parece haberle gustado más una chuchería que el misterio de lo que ocultan esos paquetes

- Este- responde cogiendo el que le pilla más cerca

- ¿Estás seguro?- intenta salvarle de su error- ¿Qué nombre pone?- pregunta

- Mar- tín- dice seguro fingiendo leer la etiqueta

- Yo creo que no pone eso- ríe Aitana al leer desde su posición el nombre

- Ma-má- vuelve a leer- pero yo quiero abrirlo...- la pide con esa caída de pestañas a la que la catalana le es imposible resistirse

- Me puedes ayudar si quieres- cede, siendo la respuesta inmediata del pequeño la de empezar a rasgar el papel descubriendo ese frasco de colonia que hacía unos días se le había terminado- Muchas gracias tió- agradece divertida dejando un beso en el tronco sin perder de vista a Luis

- ¡Este es para mí!- se adelanta Laia al pequeño de la casa, al intuir lo que puede ser su regalo, no tardando en descubrir ese vinilo que tanto tiempo llevaba pidiendo y que lleva agotado tiempo en todas las tiendas. Ese vinilo, que quizás el tió encontró, gracias al par de conversaciones que ha tenido recientemente Luis en las oficinas de Universal para localizarlo

- ¿Este es mío?- les pregunta de nuevo Martín, cogiendo el más grande de los dos paquetes que quedan

- Leelo cariño- le pide su madre

- Martín- lee esta vez de forma certera el pequeño- El drac que no tenía foc- lee de nuevo la portada del primer cuento que ve al desenvolver ese paquete- Mira- dice colocando su dedo índice sobre el dibujo- es un dragón como el de Disney- se da cuenta sorprendido