Capitulo 42: Nuevos comienzos

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A veces parece que los astros se alinean para hacer coincidir en apenas unos días un montón de citas y tareas ineludibles, por eso, han resultado especialmente estresantes para ambos.

Mientras Aitana no para de tener pruebas, reuniones y ensayos del desfile que tendrá lugar en apenas dos días. Luis por su parte está inmerso en la composición. Trabajar con Cami parece que ha sido del agrado de todas las partes, él se siente útil, ella al fin realizada y la discográfica parece estar contenta con los resultados. Pues no solo les apremia para lanzar cuanto antes la versión definitiva de esa primera composición, sino que les ha alentado a seguir componiendo juntos, incluso han emplazado a Luis a una reunión esta misma tarde.

Para colmo, la semana en lo relativo a sus responsabilidades como padres, tampoco ha sido fácil. Mientras aún con algo de miedo mantienen la "vigilancia extra" a Laia asegurándose de que Samuel no se vuelve a desviar por el camino incorrecto, la confirmación de las altas capacidades de Martín les ha traído más de una conversación, incluso discusión.

Lo que a priori debía ser una buena noticia, parece haber incomodado en el centro, cuya respuesta inicial fue adelantar un curso al pequeño en el curso que viene. Aitana más inexperta en el tema, estaba más dispuesta a dejarse aconsejar por los profesionales, sin embargo Luis, no parecía estar de acuerdo. Se negaba en rotundo a que su pequeño de 4 años diera el salto a primaria antes de tiempo, pues mantenía que ese cambio solo le podría traer conflictos con sus compañeros.

Y algo de razón tendría, ya que tanto Miriam, como la psicóloga del pequeño coincidieron con él. Fue finalmente gracias a la mediación y opinión de ambas, cuando encontraron una segunda opción que pusieron sobre la mesa del centro escolar.

La adaptación curricular para Martín no sería fácil, pero Miriam trabajando en el mismo colegio, se comprometió a ayudar a la tutora del niño hasta que asignaran el curso que viene al centro una profesora de apoyo para ese cometido. Además, el Centro de Niños Superdotados en el que les hicieron la evaluación, también se comprometió a facilitar material y asesoramiento a los profesores en caso de que lo necesitaran, así como a mantener un seguimiento con Martín para valorar su evolución y guiarle ante cualquier conflicto.

Poco a poco parecen alcanzar ese equilibrio que llevan días buscando o esa sensación tiene Miriam cuando desde la puerta de la clase Martín espera algo impaciente al que el pequeño termine por despedirse.

Ha colgado su babi, cogido su cantimplora de agua y su mochila con dinosaurios estampados y su nombre grabado en la solapa

- Espera tita- la señala depositando en ella todas sus pertenencias, llevándose consigo únicamente una pegatina que coge de una de sus libretas

La gallega ve como el pequeño toca a la espalda de una niña con una corta melena rubia, que parece algo disgustada mientras la tutora de ambos intenta consolarla. Los ojos algo rasgados y azules escondidos tras unas gafas de pasta, parecen recuperar algo de luz, cuando Martín la enseña esa pegatina de un delfín azul que hace unos segundos ha cogido de su mochila. La sonrisa de esa niña no tarda en tatuarse en ese rostro, dotándola de la apariencia de un auténtico ángel. Más cuando sus pecas resaltan en sus mejillas con algo de vergüenza, cuando como agradecimiento da un fuerte abrazo a Martín.

- ¿Qué le pasaba a la nena?- se interesa Miriam cuando al fin su sobrino va a su encuentro, ya que desde su posición no ha podido escuchar la breve conversación de los niños

- Estaba un poco triste poque su papá viene un poco más tarde hoy- explica- yo la he dicho que no pasa nada, que a mi hoy me venías a buscar tú y no eres mi mamá

- Ahora vamos con mamá a su trabajo, que esta con la prima por lo del desfile- responde la gallega dándole la razón por la cual su madre no ha podido acudir

SaudadeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora