VISITAS NOCTURNAS

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¡Vamos, chicas, en pie! gritó Hyuna, aporreando la puerta hasta que Rosé abrió, dejándola entrar. Despierten, iré levantando a todos los demás... Manoban, ¿qué te ha pasado en la frente? —preguntó con aires de burla al ver la marca rojiza que tenía justamente en medio.

Las demás se le quedaron observando, comenzando a reír—: ¿te caíste de la cama en plena noche, Lis? —preguntó, Jisoo.

—Yo diría que más bien a la presidenta la tiraron de la cama en plena noche... —soltó, Momo, sonriendo ladinamente mientras observaba el ceño fruncido de la rubia.

—¿A qué te refieres, Momo? —cuestionó la tutora, sospechando de ciertas y determinadas cosas.

—Esto... Yo siempre duermo en el borde de la cama, y si mal no recuerdo, Momo llegó de... —La observó desafiantemente—. ¿Del baño, no es así?

—¡Eh, sí, exacto! —añadió, rápidamente—. No encendí la luz por no despertar a nadie y cuando regresé me tropecé en su cama y caí sobre ella.

—Eso es, ella me empujó sin querer y yo caí de cara... —terminó de explicar Lisa.

—Ya veo... Bien, alístense ya, iré despertando al resto del grupo para que desayunen, en dos horas comienzan las actividades. Hasta luego, chicas —se despidió, marchándose de allí.

—Bueno, ahora digan la verdad, ¿qué pasó ayer? —exigió Nayeon, como buena presidenta del club de periodismo buscando la verdad tras los acontecimientos—. Momo, ayer desapareció y más tarde me pareció oírla haciendo un poco de escándalo, y desde la cama de Lisa se escucharon algunos golpes contra la pared en plena noche, bueno, ¿qué tienen que decir al respecto?

—Yo no me enteré de nada, una vez caigo ya no reacciono... Hazme sitio, por favor —añadió Rosé, Jisoo asintiendo en acuerdo con la que se tumbó a su lado en la cama, arropándose de nuevo.

Lisa y Momo se miraron unos segundos cuál duelo de vaqueros en el medio oeste, midiéndose para ver quien disparaba primero—: ¡Momo se escapó y regresó borracha! —Lisa apuntó primero el tanto, todas las miradas cayendo en la pelinegra.

—Pensé por un momento que ibas a guardarme el secreto, ya veo que para ti la tregua terminó ayer en la competencia, sucia traidora. No te preocupes, yo tengo otra para ti, presidenta —Carraspeó cómicamente, tomando incluso aire antes de soltar su propio cóctel molotov—. ¡Kim y Manoban lo hicieron anoche en su cama! ¡Y en el baño! —Le dio la vuelta al tablero, Lisa sonrojándose al ganarse las pícaras miradas de sus compañeras de dormitorio—. De hecho... Esa marca en realidad te la hizo ella cuando te... Empujó tan fuerte que te golpeaste varias veces con los barrotes del respaldo de la cama.

—Perra rastrera... No tienes pruebas... —respondió Lisa, intentando quitarse sospechas de encima—. Esas son acusaciones muy falsas, soy inocente —soltó, encogiéndose de hombros y forzando una cara seria mientras recordaba la placentera visita nocturna con que la sorprendió su novia.


[Flashback]

Lisa siguió el consejo de Jennie, y durante la segunda ronda ella y Momo lograron acaparar más posición, empujando a las rivales a bailar una tercera para un desempate. Una vez más iniciaron las contrarias, sin embargo, cuando la castaña escuchó que era City girls la canción que estaba sonando, supo que ya no tendrían oportunidad alguna. Ellas ocuparon la primera mitad de la canción, dejándoles la segunda a las locales.

La rubia inició sola, uniéndose más tarde Momo para quedar de cara las visitantes mientras Lisa estaba tras ella, espalda con espalda, orientada hacia atrás sabiendo que esa era la parte favorita de la castaña, que se percató rápidamente de aquella sonrisa pícara, y el sutil guiño que le enviaron esos ámbares danzando alegres y brillantes.

Última RimaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora