Capitulo diez.

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                                                          10.

¿Primera cita?

Esto se me estaba yendo de las manos. Me quedaban 10 días para enamorar a Justin. Y no tenía ni idea de si él sentía por lo menos algo mínimo por mí, ya que cada vez que podía le coqueteaba a una chica y yo odiaba eso. ¿Es que era yo la que estaba comenzando a sentir cosas por él?

La semana había comenzado de nuevo, odiaba los lunes. Y hoy me sentía un poco mal, tenía dolor de cabeza, y para más remate, había aparecido en el blog de Agnes de nuevo.

A veces, no entendía a Justin, un día era amoroso conmigo, y al día siguiente lo era con una chica diferente. Odiaba eso, en parte odiaba su actitud.

—Hey. —Él se me puso por delante, y me dio una de sus sonrisas que hacen que quieras quitarte la ropa.

—Hey. —Murmuré. —¿Qué quieres, Justin?

—¿Por qué siempre eres tan antipática conmigo muñeca?, Un segundo pareces quererme, parece estar todo bien, y al otro eres fría, y te enojas.

—Yo no te quiero. —Le dije directamente. El frunció el ceño.

—Como sea. Vengo a hacerte una propuesta.

Rodé mis ojos, y eso pareció molestarle.

—¿Sabes? No estaré toda la vida rogándote para que salgas conmigo.

—No espero que lo hagas. —Respondí cortante.

Seguí caminando, debía ir a mi habitación rápido.

—Ten una cita conmigo. —Se puso delante de mí de nuevo, y tomó mi mano.

—¿Qué? —A él se le escapó una risa.

—Mierda, es cierto. Eres adinerada, y educada. —Se lamió los labios, y continuó—Señorita Collins, ¿me daría el placer de salir hoy por la noche conmigo?

—Es lunes Justin.

—¿Y eso qué? Escápate conmigo. —Susurró.

Dios yo… Se veía tierno. Rodé mis ojos de nuevo, no caería. Tenía que recordar que estaba enojada con él. Y a pesar de la apuesta que tenía con Kendall y Marcus yo no era la segunda opción de nadie, y menos de alguien como él.

—¿Piensas que soy una chica más de tu montón, Justin? —La pregunta se me escapó sin que pudiera pensarla mejor. El me miró, y luego respondió;

—Por qué piensas que hay un montón, Leah. —Su respuesta era técnicamente una pregunta, pero no fue entonada como tal.

—Porque un día me hablas, me besas, me invitas a una cita caballerosamente, y al otro estás coqueteándole a otra, e intentando acostarte con ella.

Vi la puerta de mi habitación. Si las chicas seguían mirándonos a Justin y a mí, eso se convertiría en una gran escena. Últimamente, solo al caminar con Justin, teníamos toda la atención. Él se encogió de hombros.

—Porque tengo necesidades. —Respondió sin expresión alguna en su rostro.

—¿Porque yo, Justin?

—¿A qué te refieres con eso? —preguntó.

—¿Porque no me dejas tranquila, y sigues coqueteándole a las otras como siempre lo has hecho?— Dios, estábamos haciendo de esto algo más grande.

—Porque eres la primera chica que me rechaza. Bueno, rechazar en parte, hace algunos días te he besado y no has tendido a abofetearme. Y me excita que me rechaces. Hace que quiera acercarme aún más a ti.

BANG. (Justin Bieber) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora