BANG. (Justin Bieber)

Capitulo setenta y dos.

72.

Problemas. —Parte dos.

 

—No lo sé Kendall. Él hace que piense todo de otra manera. —Kendall suspiró y se tapo más con la manta mientras nos concentrábamos en la película.

—A veces tengo miedo Leah. —Me confesó. —No sé en qué nos estamos metiendo pero simplemente no puedo alejarme.

—Me pasa lo...—Liam nos miró y se acomodó la chaqueta. Mark y el iban a salir. De nuevo. Tenía que hablar con mi hermano sobre esto. Sabía que Mark salía con Liam solo para evitarme y a Liam no le quedaba de otra.

—Volveré tarde piojo. —Dijo inclinándose para besar mi frente y luego revolver mi cabello suavemente.

—Cuídate, y llámame. —Le dije. Él rodó los ojos. Bufé, el hacía lo mismo conmigo.

—Si, mamá. —Él besó la mejilla de Kendall. Y yo miré a Mark. Él nos miró a ambas y nos hizo una seña con su rostro.

—¿Por qué Zoey no baja? —Dije volviéndome a Liam.

—Está tomando una ducha. Baja en unos minutos. Activa el sistema de seguridad. —Me recordó.

Asentí y el murmuro algo de que dejaba su teléfono arriba. Mark salió mientras tanto, y decidí seguirlo.

Le tomé el brazo, y lo obligue a que me mirara.

—¿Qué? —Escupió fríamente. Lo miré indignada.

—¿Qué? ¿Es lo único que vas a decir?

—Si. —Respondió. Rodé mis ojos y respire con frustración.

—¿Por qué eres así conmigo? —Pregunté. —¿Por qué estás enojado?

—No estoy enojado contigo Leah.

—Mark, me ignoras.

—Joder Leah, no es nada.

—Te adoro Mark. Eres mi mejor amigo y...—No pude seguir hablando. Solo pasó. Él me besó. Mark me había callado con un beso y Dios, simplemente no podía reaccionar. Movió sus labios sobre los míos, un lapso de apenas tres cortos segundos pero que fueron eternos. Me soltó y se maldijo a si mismo mirando hacia el lado.

—Ese es el problema Leah. Somos mejores amigos.

Se giró y apunto con la llave al auto de Liam para quitar la alarma. Un segundo después mi hermano salió y ambos se subieron al auto. Yo aún estaba en shock. Mi mejor amigo me había besado. Y pronto, no pude evitar pensar en Justin. ¿Todo esto era por él? Tal vez Mark solo estaba celoso porque no estaba pendiente de él.

Entré pálida a la casa. Kendall y Zoey me miraron un segundo y siguieron hablando de no sé qué cosa. Luego, su atención se enfocó en mí.

—¿Qué pasó Leah? —Preguntó Kendall mirándome con preocupación. Las miré a ambas y trague con dificultad.

—Mark me besó allí afuera.

Las reacciones fueron totalmente opuestas. La boca de Zoey calló abierta en silencio y Kendall soltó un pequeño grito. Luego de que Zoey salió de su trance también grito y ambas se me abalanzaron para preguntarme cosas. Mi teléfono entonces comenzó a sonar.

—¿Es Justin? —Pregunto Kendall.

—No, es... Cassandra. —Fruncí el ceño y conteste al instante.