Mía
-Tengo muchas agujetas , me niego a tener fitness hoy.-me cruzo de brazos en frente del espejo y , muy rápidamente , se escuchan risas.
Fitness no era el motivo de mi devoción , siempre he sido de las que dicen que van a ir al gimnasio todos los días y al final no iba nunca , pero aquí estaba obligada a hacerlo y , además , sin pagar , así que por mucho que me quejara no podía faltar.
-Pues Cesc dijo que hoy sería más duro que ayer.-me avisa Sam divertida y yo hago un sonido de queja.
-Pues vaya , y encima hay pase de micros , esta noche termino frita.-los brazos de Flavio me rodean por atrás riendo por mi cara de queja y yo también río.-Es que no es justo , Cesc me odia.
-Eso es imposible , pequeñita.-intervienen Nia.-Cualquier ser que te odie no es un ser.
-Pues yo la odio.-frunzo el ceño hacia Hugo que intenta poner cara de malo , pero no evita reír cuando le miro.
-Pues esta noche no me vengas a buscar para dormir conmigo.-le casi amenazo , después me doy la vuelta y caigo en los brazos de Fla que están muy calentitos.
Ayer , a eso de las doce , Hugo apareció en mi cama con un bajón terrible , de esos que uno siempre se guarda , pero que él , al saber que yo no le iba a juzgar , vino a contarme a mí.
Tenía mucho miedo de irse y , además , de hacerlo sin poder lograr todo lo que quiera , sin poder hacer lo que le gusta totalmente y , a la vez , tenía miedo de que esta semana al haber firmas darse cuenta de que nadie le iba a votar. A mí se me encogió el pecho cuando le escuché decir eso mientras lagrimitas caían de sus ojos , porque no es algo que pueda sentir totalmente y algo que pueda comprender con total naturalidad , nunca he sentido eso de estar cumpliendo uno de tus sueños y que puede que de un día a otro te lo quiten , pero , aún así , le había dado todos los ánimos posibles y cariñitos , porque en mi pecho no cabe verle triste , así que , como supe un día en el que me dijeron la cosa más fea del mundo , un abrazo es la mejor medicina y eso es lo que yo le di.
-Pues no te hago un zumo.-escucho desde el fondo de los brazos de Flavio.
-Pues no te doy besitos.-digo una vez separada y cruzándome de brazos.
-Pues te los doy yo.-abro la boca sorprendida por su gran táctica y todos los de nuestro al rededor ríen.
-Zasca.-ánima la cosa Anaju.
-Estáis todos contra mí , de verdad , primero Cesc , luego Hugo , ahora todos , de verdad , me voy a desayunar a ver si al menos hoy hay aguacates.-camino dando vueltas a mi coleta mientras los demás se siguen riendo de mí , pero una mano cae en mi hombro y como no , es el capitán del zasca.
-Estás súper guapa hoy , me encanta como te quedan las coletas.-cierro los ojos avergonzada por su piropo , él ríe por mi vergüenza y me abraza.
Los abrazos de Hugo son algo sobre lo que pienso mucho , sobre su valor , pero no solo de los abrazos , si no también de él.
Siempre sueñas y sueñas con encontrar a esa persona que no te de miedo tener al lado porque sabes que jamás de lo jamases te haría daño , a lo largo de mi vida he tenido muy pocas de esas personas y desde que entré aquí , de repente , encontré a un millón de personas con las que sentí eso , pero de alguna forma Hugo es diferente.
Me hizo daño , porque lo hizo , pero me demostró que hacer daño no es igual a querer hacerlo , que a veces no somos conscientes de nuestros actos y que cuando verdaderamente nos importa alguien hay que hacerle saber que todo el daño no fue queriendo , que los pequeños rasguños no son de verdad, que cuando se quiere a una persona se debe de perder el puto orgullo , Hugo me enseñó mucho más que un libro , mucho más que una canción , quizás es por qué Hugo es una mezcla de muchas cosas y enseña más que nada o , simplemente , y lo que Anaju dice , es que el corazón de Hugo me quiere mucho así que no tiene otra que hacérmelo saber.