Hugo
Cuando decidí teñirme de rubio lo hice sin ninguna idea más de cambiar de look , de hacer notar un poco más el color de mi pelo que estaba bastante camuflado , lo hice sin tener ni idea de que cada vez que me mirara en el espejo y ver el color rubio me iba a acordar de ella , de mi rubita.
La había cagado muchas veces en mi vida , desde pequeño cuando le daba mucho por culo a mi madre , cuando tenía doce años y me declare a una niña con el himno del Córdoba , cuando una novia me dejó y yo no lo quise aceptar , pero todo eso de alguna forma no me afectó tanto , fue como un aprendizaje por el que daba las gracias , pero todas las veces que la he cagado en la academia , todas las veces que la he cagado con ella no se merecían unas gracias , más bien , yo me merecía algo , sí , pero tan solo era una hostia.
Tenía su cuerpo entre mis brazos , su pelo rubio cayendo por su espalda y yo enredando mis dedos en él , su mejilla chocando con mi cuello y mi cabeza apoyada en su hombro , susurros incansables , besos en el cuello hasta que nos quedaramos dormidos y muchas ganas de no cagarla , no con ella , no de nuevo.
Pero , como siempre , la cagaba.
Lo primero que me pasó por la cabeza al ver a Aurora fue Mía de nuevo , era obvio , y en ese momento me sentí como la mierda por Aurora , porque ella me quería y se suponía que yo a ella también , que la iba a querer siempre , era cierto , lo prometí y me siento idiota por no poderlo cumplirlo , pero aún más idiota me sentí por no poder decirle nada , por no poder gritarle que ya no había amor , que el amor se lo quería dar a otra persona , entonces , cuando estaba decidido a pedir hablar en privado con ella una avalancha de "beso" se metió por mis oídos y , aunque eso no es excusa , la besé , pero sin sentir esa chispa que siempre me hacía querer más de sus labios , yo solo quería tener a mi rubita entre mis brazos , chiquitita , con una de mis sudaderas puestas y pidiéndome que le hiciera un zumo para desayunar , pero también digo , en el momento en el que terminó el beso con Aurora supe que eso no volvería a pasar.
Y lo confirme cuando hablamos , no me pude oponer a nada de lo que decía , era ella quien tenía que decidir lo que queria , yo no tenía derecho ni a hablar después de lo que habia hecho , después de ser un mierda y tal vez un cobarde por no plantar cara a lo que tenía que plantar cara , pero al menos no era solo un mierda.
Era un mierda y su amigo.
Su amigo el majo , el gracioso.
El amigo al que le gustaría ser más valiente para pasar a ser otra cosa.
El amigo al que ya no le sirve ni la valentía.
El amigo al que ahora mismo solo podía sacar de ese situación un milagro.
Gracias a Dios los cabellos de Mía son como los de Rapunzel , tienen magia.
(...)
¿
Sabéis eso que se siente cuando una persona a la que aún quieres se aleja de ti?
Sí , que tus amigas te dicen que al día siguiente te habrás olvidado , y que te tomes un par de copas para olvidar todo eso y se te pasa , pero en realidad al día siguiente estás peor , con resaca y viendo como la herida es más profunda.
Pues igual me sentía con el tobillo , el médico decía "mañana estarás mejor" y una mierda , este dolor no lo quita ni los médicos que salen operando a gente con chapuzas estéticas , que por cierto , en cuanto llegue a mi casa haré un maratón de eso con mi madre , si es que tengo tiempo.
—Mai , ¿me acercas las muletas?—digo con un tono algo bajo porque casi todos estaban dormidos.
—¿Las muletas? ¿No prefieres que le diga a Mariona que te traigan la silla de ruedas de ayer? Yo es que no creo que debas usar las muletas ya , ¿cómo te sientes?—la del flequillo camina hasta mi cama , bueno , la cama de Sam que ya que era baja y ella dormía con Flavio me había mudado aquí para no tener que subir escaleras , y se sienta a mi lado esperando mi respuesta.
