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Mía

Hoy me siento más calentita que nunca a pesar de llevar mi estúpido pijama de rayas poco protector al frío , Flavio insistió en que durmiera con él porque él sabía de más que si me acostaba sola le iba a dar vueltas a lo que fuera que me hacía llorar y yo , sin muchas fuerzas para protestar y muchas ganas de dormir con él ,  acepté.

—¿Hoy hay fitness de nuevo verdad?—pregunto al aire recibiendo la risa de Gerard , eso es que sí.

Ayer en clase de fitness Gerard se había dedicado a meterse conmigo por lo mal que hacía deporte mientras que Hugo , también riéndose de mí , me decía que le mirara y le siguiera el ritmo pero el cabron iba más rápido cuando yo me ponía a imitarlo , un desastre , pero más que eso , un chiste para los demás.

—Joe...—sonrío al escuchar a Flavio , parece que lo he despertado.—Buenos días.

—Buenos días.—no me había sentido incómoda ni ayer por la noche ni durante la madrugada , pero por alguna razón me ponía incómoda que todos nos estuvieran viendo , no estaba acostumbrada así que dejo un beso en su mejilla y salgo de allí por mucha que quisiera seguir en el valor de su cama.—Buah , está casi todo el mundo fuera.—digo al ver que los únicos que faltamos somos Flavio , Gerard , Anne , Samantha y yo.

—Están todos desayunando.—me dice Anne con cara de dormida y me da un abrazo de buenos días.—Ya me contaras que haces durmiendo con Flavio.—me susurra en el oído y yo la miro mal , iba a conseguir que me sintiera incómoda.

—Calla.—respondo haciéndola reír.

(...)

—Estoy muerta.—me quejo sentándome en una de las sillas de la mesa , ahora teníamos que desayunar.—Es que es horrible.

—Sobre todo cuando hay que coger fuerza , es que es horrible—se queja también Anne a mi lado.

Hugo y Gerard nos miran mientras se dicen cosas al oído y se ríen , Anne los mira con mala leche y yo no puedo evitar reír al ver la cara de la de los rizos.

—¿Muchas risas no?

—¡Ay! Qué no puedo , no puedo , no puedo...—Hugo empieza a hacer una especie de imitación , como si estuviera intentando de levantar algo y no pudiera , levanto una ceja en cuanto me doy cuenta de que me está imitando a mí y bufo.

Me levanto haciéndole un corte de manga a ambos que se empiezan a reír más pero yo les ignoro , como le echara cuenta sería peor y no saldríamos del bucle.

—Ari , ¿qué tal?—estos días me había distanciado un poco de la chica , pero es que a penas ella tampoco podía estar conmigo , las dos estábamos ocupadas.

—Bueno , ahí voy.—me responde , le sonrío y ella se aleja a mí , no es que la note más distante , si no que está distinta , la Ariadna que yo conocía nunca iría sin maquillar por aquí , ama arreglarse , pero no le doy más vueltas , porque sé que Nia se ha acercado a ella para ayudarla , ella misma me lo había dicho.

Decido coger una tostada , un poco de mantequilla e ir directa a sentarme porque si no iba a morir.

—¿De nuevo sin nada de beber?—miro mal a Hugo , no estoy enfadada , pero si intento hacermelo.—¿Estás enfadada? Anda , toma una servilleta.—el rubio deja un servilleta y se inclina a mirarme , pero yo no nuestro ni un ápice de felicidad , así que el rubio se va.

—¿En serio estás enfadada?—río por la pregunta de Anne y ella también ríe al darse cuenta de mi mentira.—Que capulla.—suelta mientras me hace una seña de que Hugo viene así que me vuelvo a poner seria.—Es que de verdad , Hugo , no se puede hacer esas cosas.—Hugo nos mira a ambas como esperando a ver si es verdad , nosotras nos miramos y es entonces cuando nos empezamos a reír.

Mía | OT2020 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora