Mía
Los brazos de Gerard me rodean aferrándose a mí con fuerza , yo también lo hago con él.
No nos podíamos aferrar a otra cosa , él me tenía a mí y yo a él , era lo único que nos quedaba aquí de Anne , lo único que nos quedaba de nuestra pequeña familia aquí adentro , nosotros.Con cuidado de no despertar al rubio me levanto poco a poco , tengo los pelos hechos un lío del peinado de ayer , así que cojo uno de los cogecolas que siempre dejo en el suelo junto a mi botella de agua y me hago un cola baja hasta que pueda peinarme.
—Buenos días , ¿qué tal?—la voz de Sam se escucha en la habitación y justo está delante de mí.
Al contrario que yo ella , como siempre , está guapísima y es que si me dijeran que es top model lo creería , al igual que Nia , no sabía cómo hacían para estar siempre tan guapas , supongo que hay cosas que la genética puede lograr.
—Bueno , podría ser peor.—respondo acercándome a ella para darle un pequeño abrazo.—Y encima los nominados de esta semana , Dios...—cierro los ojos mientras estoy abrazada a ella.
La semana pasada Anne , Bruno y Fla , esta semana Hugo , Bruno y Rafa , si yo estaba mal ahora que lo pienso Bruno tiene que estar también jodido , el pobre.
Por no hablar de Rafa y Hugo , con los que ayer no había hablado porque el único consuelo que tuve fue Gerard , estaba destrozado a pesar de no llorar frente a cámaras para no poner peor a Anne , que según vi en el chat , cuando me colé en la llamada que tuvo este con ella , estaba bastante mal y sin ningunas ganas de querer irse , solo espero que fuera le vaya genial hasta que pueda abrazarla.—Bueno , a ser positiva , ¿me lo prometes?—suspiro y asiento mirando a Sam que me sonríe , sería positiva porque no me quedaba otra , pero ganas no tenía.
La rubia se separa de mí y ambas caminamos hacia la salida de la habitación.
Sonrío tristemente al recordar que hay un jersey que ya no tengo , es la primera vez que me roban cosas y es que Anne , tan insegura como siempre , me había quitado uno a Gerard y a mí para hacernos prometer de una forma estúpida que lo primero que haríamos al salir sería ir a verlas y a por nuestra ropa.
A cambio yo me había quedado con una sudadera suya , que nunca usaba ella , pero que ahora usaría yo.
También le había dejado una carta en los zapatos que espero que lea antes de meter el pie.—Buenos días , mi pequeñita.—los brazos de Nia me acogen rápidamente como los de una hermana mayor que nunca he tenido y yo disfruto en ellos , los abrazos de Nia son muy reconfortantes.
—Buenos días.—respondo mientras nos separamos.—Me voy a vestir y ahora hablamos , que si no se me hace tarde.
(...)
—Hugooooo.—alargo la última vocal mientras el rubio pasa por el pasillo hacia la cocina sin decir nada.—¡Hugo!
—¡Dime!
—¡Ven!—chillo y este asoma su cabeza de forma misteriosa haciendome reír a Nia y a mí.—¿Me das un abrazo?—pido haciendo un pequeño puchero que hace reír a Nia , la semana pasada me tuve que hacer a la idea de muchas cosas y ni aún así cuando Anne se fue estuve preparada , así que no me imagino como iba a estar si Hugo se fuera , rota , sin duda , así que pretendo estar con él el máximo tiempo posible , todo el que habíamos perdido.
—Que mala es , usa el puchero siempre porque sabe que funciona.— vacila y yo le saco la lengua a Nia a modo de burla y entonces los brazos de Hugo me rodean por la cintura incluso levantandome del suelo.
