Hugo
Las canciones típicas que nos ponen por la mañana para despertarnos están sonando , yo intento moverme para estirarme pero es imposible hoy , pues además de tener unos pelitos rubios que me hacen cosquillitas en la cara , mis brazos están rodeando a alguien que no es lo almohada por primera vez en la academia.
Aparto los pelos rubios , un poco castaños ya , de la chica mientras la miro sonriente , parece un bebé de esos que cuándo abren los ojos miran todo con curiosidad , y de alguna forma lo era. Más de una vez en las pocas comidas que llevamos aquí me había perdido en los ojos de mi amiga al ver como se mueven mirando a todos lados para ver descubrir un poco más de cada uno , porque se siente culpable de no haberse acercado antes , yo también me sentía culpable de no haberme dado cuenta de ello y haberme acercado.
La pego más a mí y apoyo mi cabeza en su hombro , disfrutando del suave olor que ella tiene , y es que tanto su colonia como el champú que nos daban aquí era de coco , así que estar con ella era como estar en uno de esos puestos de la feria en los que venden coco , pero ella valía más que un simple trozo.
—¿No la piensas despertar?—la voz de Ariadna interrumpe el momento y niego.
—Ahora luego , que está muy dormidita.—Ari ríe y me mira con una ceja levantada.
—Esa chica necesita un rato para ser persona , te aconsejo que la despiertes ya antes de que la despiertes con la hora justa y no le de tiempo.—suspiro y asiento , supongo que tendrá razón porque estos últimos días la había visto que le costaba levantarse.
Lo que yo decía , una bebé.
—Mía.—susurro acariciando su cama suavemente.
—Umm.—suelto una risa al escuchar sus quejas y entonces , cuando estoy dispuesto a hablar de nuevo , sus ojos se abren y río al recordar lo que antes pensaba de ellos y que es totalmente la verdad.—No quiero.—se queja escondiéndose en mi pecho , pues aún la tengo rodeada.
—Ya , pero tampoco querrás llegar tarde a la clase.—ella levanta la cabeza y me mira frunciendo el ceño.
—Si quieres echarme de tu cama dímelo , eh , cordobés.—sé que está bromeando por lo último que dice y es que ella era muy buena y de malas maneras sé que no lo diría así.—No , no me lo digas , ya me voy yo.—mis manos la atrapan pero ella se escurre hacia abajo quedando al lado de mis pies sonriente.—¡Perdiste!—me chicha para después levantarse riendo.
Mía
—Un poco de silencio por favor.—escucho decir a Flavio desde el final de la sala y me muerdo el labio divertida y a la vez arrepentida por haber gritado.
—Uy , se te juta el rebaño , Mía.—Gerard interviene y yo le miro con una ceja levantada , sé que lo dice por la conversación de ayer entre Anne y yo en la que él se metió así que le miro mal.
—Cállate , pollito.—le amenazo y él abre la boca.
—¿Te ha llamado pollito?—Anne nos mira riendo y me choca la mano por el nuevo mote de Gerard.—Me encanta , Gery el pollito.
—Vosotras os lo habéis buscados , ¿estás escuchando verdad Flavio?—el moreno nos mira con cara de dormido y se acaba de acercar a nosotros así que no sabe de qué hablamos.—La señorita esta de aquí.—me señala.—Me ha llamado pollito.—Flavio suelta una carcajada y me mira al ver que Gerard le mira mal , así que se aguanta la risa.
—Ya te vale , Mía.—me pelea falsamente.
—¡Ja!—chilla Gerard como si hubiera ganando algo.—La venganza será terrible y Flavio me ayudará , así que cuidado con los pasos que dais , Lukin y Tuya.—abro la boca por su mote y me hago un corte de manga.