Nos seguimos odiando ¿verdad? // Jenlisa

Siempre estar para ella

- ¿Está alguien en tu casa? -

- E-Estaba..... no - Respondió bajando la cabeza.

- Mucho mejor - Opinó Jennie.

- ¿P-por qué? ¿Quieres..... - Tanto como a ella la tomó por sorpresa el beso de Jennie como a ésta también le sorprendió la necesidad con la que necesitaba besar sus labios, los había extrañado tanto que al unísono suspiraron. Jennie enredó sus manos en su cabello profundizando el beso, no pensaba separarse por nada del mundo.

Lisa quien no sabía cuánto había extrañado sus labios comenzó a pegarla contra su cuerpo mientras la tomaba por la cintura. Con su lengua acarició su labio inferior, pidiendo permiso para entrar y ésta inmediato entreabrió la boca para por fin jadear al volver a sentir la lengua de Lisa explorar toda su cavidad bucal. Se besaban hambrientas, con ferocidad pero con algo que sabía diferente y qué las dos notaron al momento que se separaron.

- Te amo, Lisa - Confesó Jennie.

- ¿Q-Qué? -

- Que te amo, te amo, te amo mucho. Estoy completamente enamorada de ti, ni siquiera puedo aguantar a estar molesta contigo porque no sabes lo mucho que te necesito. Eres lo único que necesito en esta vida para ser feliz, ¿recuerdas que no tenía ninguna razón? ¿recuerdas que en mi vida no tenía nada bueno? ¿Lo recuerdas? - Presionó y Lisa asintió atontada. - ¿Recuerdas que con el tiempo buscaría una razón que a mi vida le diera sentido? - Lisa volvió a asentir sonrojada aún no se quitaba lo bien que sonaba el "te amo" en sus labios. - Pues ya no tengo que buscarla, Lisa. Eres tú, siempre estuviste frente a mí y yo buscándote, tú eres lo que le da sentido a mi vida, porque créeme, amor mío..... que tú eres lo único que necesito para vivir - El sonrojado no abandonaba las mejillas de Lisa. - No sé cómo explicártelo, Lisa. Pero eres eso y mucho más, eres mi vida entera y te amo. Sin ti ya no puedo estar y te amo - La nombrada seguía atontada si poder dejar de observar esa mirada felina que tenía enfrente. - Juro que te amo con todo mi ser y con todo mi cuerpo, no hay nada de mí que no te pertenezca y...... y te amo - No había más palabras que se resumieron a lo que Jennie podía sentir por la chica que la observaba con ojos dilatados más que el te amo, el amor que sentía por ella no se comparaba con nada que valiera más la pena.

Lisa volvió acercarse a ella para besarla, pero esta vez haciéndolo lentamente y con un amor inexplicable que sintió en el corazón.

- Yo también te amo, Nini. No sabes cuanto.... - Suspiró. - No quiero volver a estar separada de ti nunca más, eres como el aire que necesito y.... y quiero que siga haciendo así - Sin querer se le salió una lagrima al sentirse después de hace mucho tiempo amada. - Y-Yo..... -

- Sé que estuviste llorando, Lili - Limpió cualquier rastro de agua entre sus dedos mientras acariciaba su rostro entre sus manos. - No digas que no - Se apresuró hablar. - Sé que antes de que llegara estuviste llorando, lo siento - Esta vez a ella le tocó decir. - Sé que fue por mi culpa, pero ya estoy aquí y no pienso irme -

- ¿T-Te quedarás conmigo? ¿no estás enojada? - Jennie negó sonriente. - Te..... te amo - Dijo tiernamente.

- Lisa - Se abrazó fuerte a ella como nunca lo había hecho. - Ya no te vuelvas a separar de mí, no dejes que lo hagan - Pidió.

- Nunca te voy a dejar, eres mí vida como para hacerlo - Y de silencio se embargó, pero fue cómodo mientras seguían abrazándose y relajándose con la respiración de la una a la otra. - No sabes...... cuanto te amo -

- ¿Y..... y por qué no me lo dices? -

- Porque no sé..... no sé.... no sé cómo explicarlo - Respondió Lisa frustrada. - No sé cómo.... porque yo nunca me había sentido querida, ni..... ni había querido. No.... no sabía qué se sentía tanto, y.... y -