La libertad

4.8K 393 79
                                    

- ¿Me contarás lo que sientes? - Preguntó acariciando el cabello de Lisa, quien se encontraba con su cabeza recostada en sus piernas mientras la castaña le daba caricias en aquel sofá demasiado grande para solo ellas dos.

- ¿C-Crees que Kai me odie? - Preguntó nerviosa.

- Lisa - No sabía qué decir cuando se encontraba igual pensando si su hermano la odiaba o no. - Creo que es una palabra fuerte, y siento que Kai no te odia, te quiere y necesita tiempo, es lo que necesita -

- Soy una cobarde - Susurró Lisa. - Solo..... solo me escondía -

- Lisa, ya no te lamentes por algo qué no hicimos - Aunque ella lo seguía haciendo sabía que era algo del pasado.

- Ni siquiera he podido acercarme a tu hermano para...... para tan sólo disculparme. No..... no hice nada bien, dime s-si algo mal estoy haciendo contigo porque no quiero perderte - Confesó avergonzada. - ¿Hay algo de mi que.... -

- Lisa - Le reprochó. - No eres una cobarde, y no hay algo que no me guste de ti. Todo en ti es perfecto -

- ¿Solo yo...... yo te gusto? - Se giró para quedar boca arriba en las piernas de Jennie mientras esperaba su respuesta. - ¿Solo a mí me quieres? -

- Sí, Lisa. Ni siquiera me interesa otra persona que no seas tú - Poco a poco ganaba seguridad en sus palabras y dejaba de ser tan penosa. - Así que ni modo, Lili. Me vas a tener que estar aguantando por mucho tiempo porque jamás quiero que te separes de mí -

- Con..... con gusto te voy aguantar - Sonrío. - Porque también tendrás que hacerlo conmigo -

- ¿Por mucho tiempo estaremos juntas? - Esta vez fue Jennie la que preguntó.

- Si....... si quieres estar conmigo - Contestó Lisa. - Porque yo quiero estar contigo hasta hacerme viejita -

- Hasta hacernos viejitas - Afirmó mientras reía un poco.

- ¿Siempre estarás conmigo? - Jennie asintió. - ¿Y tendremos muchos hijos? - Lisa estaba emocionada por lo que se imaginaba.

- Sí, muchos hijos - Después de lo dicho Jennie se quedó como si estuviera perdida en otra dimensión, no pudo evitar imaginarse un futuro con Lisa, a su lado. Sonrió mientras observaba a nada en específico, se quedó perdida en sus pensamientos y emociones. Nada se comparaba con lo que sentía por Lisa, su amor por ella le llenaba tanto el pecho que sentía explotar de tanto amor por esa chica, se sentía tan llena, tan satisfecha con ese agradable sentimiento.

- Jennie - Se preocupó al verla sonreír como boba. - ¿Estás..... estás bien? - La movió un poco porque ésta no salía de su trance.

Jennie logró enfocar su vista en ella y sonrió aún más, cosa que solo causó un poco de más miedo en Lisa.
- Sí, estoy bien - Respondió finalmente. Al ver a esa chica con sus ojos llenos de preocupación, pero también de amor, porque Jennie lo sabía, los ojos de Lisa podía darle todas las respuestas que ella quisiera, al verla suspiró tanto como chica adolescente por su amor platónico. En verdad la amaba, la amaba mucho, amaba la forma en que la miraba y se preocupaba por ella, porque sabía que jamás había sentido algo así cuando alguien la miraba a los ojos, nunca había sentido que alguien le transmitiera amor con tan solo verla, en su mirada podía ver lo mucho que lograba perderse en ella. Su flequillo descansando en su frente, sus ojos tan hermosos que la veían curiosa y su perfecta nariz tanto como sus labios carnosos la hicieron quererla aún más, pues en realidad nunca sabía hasta donde iba a parar su amor por ella, con tan solo verla cada día sentía enamorarse más, más que asustarse la felicidad le ganaba porque comprobaba que Lisa se encontraba igual que enamorada de ella.

Nos seguimos odiando ¿verdad? // JenlisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora