Después de todo el día trabajando, cojo el móvil por primera vez. Mientras me preparó la cena, veo las fotos de Carla con una chica abrazadas. Estoy entre decepcionada y enfadada. ¿Eso es lo mucho que te quería? -Pensé mientras bebía vino-. Cené y me fui a bailar. Estaba enfada con ella , triste y despechada. Llamé a mis amigas, que estaban muy pendiente de mi estos días y les propuse ir a bailar salsa. Al llegar ahí lo primero que hice, fue irme a la barra y pedirme un shot de tequila. Para perder la timidez. Después de tres tequilas, estaba lista para salir a bailar.
Nos pusimos todas a bailar, yo iba a mi bola. Fuera de mi, demostrando que tengo dos pies izquierdos. Pero me daba igual, iba bailando con mis amigas, riendo y sudando. Hace muchísima calor, y hay bastante gente. La parte positiva de todo esto, que en sitios así, aun que parezca irónico. No te suelen reconocer, ya que no esperan verte ahí. Un chico moreno, y bastante guapo me cogió la mano para bailar salsa. No pude negarme ya que el era mucho mejor bailarín que yo.
Laura me había casi obligado a salir, así que se presentó en mi casa con Juana, y me convencieron para salir a bailar. Me negué, pero su don de persuasión son superiores a cualquier cosa. Así que sin ganas, me vestí y fuimos. Me llevaron a los suburbios, a una discoteca donde se baila salsa de verdad, con esencia. Un sitio pequeño, acogedor. Lleno de gente latina, que lleva el ritmo en la sangre. Donde nadie juzga y donde todos bailan. Renegué de ir, tengo la sensación de que me voy a cruzar con ella, no se porqué. Pero lo siento así. Entramos, y nos pusimos a bailar.. Al principio bailaba desganada, pero después, conforme iba entrando en calor, conseguí disfrutar. Laura se acercó y me trajo una cerveza. Me dio un pico en los labios, con todo el cariño del mundo, sin malas intenciones. Con mis amigos lo hago constantemente, no tiene nada de malo, es una forma de demostrar cariño, sin más. Igual que besó muchas veces a Juana estando de fiesta.
Mientras bailaba con él, en una de las vueltas que me dio vi como Carla besaba a una chica en los labios y reían. Deje de bailar por un minutos y me quede mirando atenta, hasta que le viera la cara. Era la chica de las fotos. Justo al girar me, pude ver que ella me miró sorprendida. Seguí bailando. Este chico se pegó mucho más a mi, y yo completamente despechada me dejé llevar. Junte mi frente con la suya y me quede a unos centímetros de su boca, el puso sus manos algo más abajo de mi cintura, pero a mi no me importó, y bailamos salsa de la forma más sensual que existía. Pegados, en medio de las piernas. Pude notar su sexo, duro. Se me hizo raro, pero no me importó.
Cuando besé a Laura de cachondeo, noté como alguien me miraba, miré y era María, estaba bailando muy pegada a un tío. Me puse muy celosa, y a la vez, pensé que ella pensaría que es mi novia, y quería aclararse lo. Me acerqué a ella y le interrumpí. Le toqué la espalda y cuando se giré le pedí que habláramos en privado.
-Estoy bailando. ¿Porque no vas y besas a tu nueva novia? ¿Con ella no te importa que te vean? -Contestó muy borde-.
-María, ven. -La cogí del brazo, y me aleje de la música todo lo que pude-.
-Carla, de verdad. Me lo dejaste muy claro, no sabes lo que sientes por mi.. no se porque insistes tanto. El otro día tuve suficiente, no puedes venir aquí, y fingir que no ha pasado nada, me has echo daño..
-María, sé lo que dije. Pero quiero decirte que pienso mucho en ti. Y que no quiero que pienses que te engaño con otra.
-¿Engañarme? Te recuerdo que me dejaste, que no estamos juntas. Fóllate a quien quieras, que yo haré lo mismo.
-Estoy intentando arreglar las cosas contigo, pero huyes de mi todo el rato..
-¿A quien me parezco?-¿Estás borracha?- -A ti que más te da.. Me voy a bailar
Intenté que me escuchara, pero estaba borracha y no quería escuchar. Me quedé cerca, ya que no quiero que le pasa nada, y mucho menos que él se aproveche de ella. Juana me hizo separar me un poco de ella.
-Carla, estamos de acuerdo que no te escucha, pero tu fuiste la que rompiste con ella, no creo que ahora mismo sea el momento de arreglar nada. Dale tiempo.
-¿Pero no ves que él se esta aprovechando? Mira donde tiene las manos.. eso es culo ya eh.. -Contesté encendida-.
-Sé que te da coraje, y que estás celosa, pero aclarate. O lo das todo por ella o no la busques más. Y esta noche habéis bebido las dos, no empeores las cosas.
-¿Y cuando hablo con ella? Si no quiere ni verme.
-Ya buscaremos la forma, ahora tranquilizate. ¿nos vamos?
-Ni de coña, yo hasta que no vea que ella está bien, no me voy. -Carla..- ¡Que no!
Después de la conversación con Carla, la dejé hablando sola. Llevo sufriendo muchos días como para que venga aguar me el único momento en el que me siento libre. Le di la mano Alejandro, y me invitó a otra copa.
-Escucha me que si bebo más, me vas a tener que llevar a casa en brazos..-Le dije riendo-.
-Estoy fuerte, seguro que consigo subir las escaleras sin tirarte al suelo -Dijo riendo-.
Yo me reí. Acepté la copa y, tras hablar un rato en la barra sentados. Note que el se acercaba mucho más a mi. Me sentía cómoda así que me olvidé de todo y me deje llevar. Me acariciaba la cara con delicadez y me apartaba el pelo de la cara. Yo sonreía y agachaba la mirada.
-¿Bailamos? -Le propuse poniendo me en pie-.
Me dio la mano y me llevo a la pista. Se abrazó a mi espalda, y movió sus caderas al compás de las mías. De una forma tan sexy, que no pude evitar poner los ojos en blanco al sentir su miembro, duro. Me dio la vuelta, y me pego a él con brusquedad. Le miré a los ojos y me mordí el labio. Me acaba de poner muy cachonda, entre el baile y las copas..
-Esa mirada.. Me pide a gritos que te besé -Contestó sujetando mi cara-.
-¿Y que vas hacer? -Le dije sonriendo-.
Me quedé mirando la situación.
-Juana, Juana.. que la va a besar.. mira.. yo lo mato...
-Carla, mejor nos vamos, va..
-Que no me voy.. -Contesté mordiendo me las uñas-.
Sin darme tiempo a reacción. Ese moreno me besó, lento. Rozó con la punta de su lengua mis labios y me besó con descaro. Por un minuto me olvide de todo, me deje llevar. Le sujete la nuca y acaricié su pelo. El contraste de su pelo corto entre mis dedos, su barba rozando mi cara, y su miembro duro contra mi pelvis, me hicieron olvidarme de toda la discoteca. Y seguí, moviendo las caderas al ritmo de la música, lo dejé de besar y bailamos, cada vez que nos juntábamos me volvía a besar y yo me dejaba llevar.
-No me lo puedo ni creer.. Se acaban de besar.. Y no una vez.. -Dije con un hilo de voz-.
-Carla,tía, nos vamos. -Me dijo Juana, sacando me de ahí-. No es momento de que ahora le reproches nada. Mañana lo meditas todo bien. En caliente no se hacen las cosas.
Cuando volví en mi, me di cuenta que Carla estaba ahí y lo aparte. La miré, ella me miro, y se fue. Me sentía mal porque ella lo viera, pero no me arrepentí de besarlo. Al final, estoy soltera.
-Me quiero ir ¿Me acompañas a casa?
-Claro, vamos. -Dijo sonriendo-.
De camino a casa, en el asiento de atrás de aquel taxi, no puede evitar mirar le los labios a ese muchacho, cada vez que hablaba. Recordé el beso que me hizo temblar hace unos minutos y no podía evitar poner me cachonda.
-¿Te quieres venir a mi casa? -Preguntó en susurro acercando se a mi boca-.
-Asentí con la cabeza- Y miré al conductor. -Dando le a entender que no estábamos solos-.

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Cuestión de piel
RomanceHistoria de amor entre dos chicas. Viven al máximo todas las emociones de forma muy visceral. ¿Te atreverías a descubrir más? Sumérgete en este libro, cada capitulo te enganchará más.