-Amor, despierta.. ¡Que ya es mi cumpleaños! Quiero mi regalo ya..-Dijo saltando encima de mi, cual niña pequeña-.
Abrí los ojos, medio dormida y me estiré mientras bostezaba. Carla me besaba la cara
con muchos besos a la vez, y yo aún aturdida me desperté.
-Que energía.. Buenos días amor.. Contesté poniendo morritos para que me besara-.
-Buenos días bonita. Levanta que me tienes que dar mi regalo..-Repitió-.
Me senté en la cama y sonreí.
-No te lo voy a dar aún.. Te lo daré esta noche, tu y yo tenemos una cena pendiente.
-Había pensando cenar con todos, con mis amigos, mi familia.. y a ver si Juana me contesta, por que ayer me dijo que no podía venir, que tiene faena. ¿Que faena? Si yo soy su jefa, y no le he mandado nada.
-Pues estará haciendo cosas de la oficina, o algo. Ya sabes que siempre trabaja desde la sombra.. Y lo de la cena, pues que remedio.. me toca compartirte.. ¿Comemos fuer tu y yo solitas entonces?
-Hecho. Podemos dejar a Chloe con mi madre y venir a casa.. y.. -Besa mi cuello-.
No se, ¿Se te ocurre algo que podamos hacer aquí?
-Pues se me ocurren muchas cosas, si. Me gusta tu plan, También puedes hacer me la pelota a ver si cedo y te doy tu regalo antes de tiempo...-Contesté besando la-.
Nos estábamos besando cuando su teléfono comenzó a sonar.
-No lo cojas..-Le dije besando su cuello-.
Carla miró por encima la pantalla del teléfono. -Es Jorge, tengo que coger lo-.
Estiró sus brazos hasta la mesita sin separar se de mi, nos quedamos sentadas en la cama con las piernas abiertas, una encima de la otra. Ella hablaba por telefono y yo dejaba caer mis besos a su cuello.
-Tose- ¡Hola! ¿Que tal? ¿Que pasa?
-¡Felicidades hermanita! -exclamo Jorge-. De parte de Noelia también, que está por aquí..
-Muchas gracias.. -Contestó mordiendo se el labio y apartando me con la mano la cara de su cuello, sin decir nada me miro y me levanto una ceja.. En plan.. "no me concentro"
-no hay por que dar las, oye, que.. no he llegado a tiempo a coger el Ave. Me he dormido.. En vez de ir hoy, iré mañana ¿Vale?
-Jolines.. Quería que estuvieras aquí..-Dijo apenada-. ¿No hay forma de que llegues a tiempo para la cena hoy?
-No, porque ademas he quedado con Noelia en que iría al cine, ya que he perdido el tren, he hecho planes. Pero mañana al medio día estoy ahí. ¿Vale? Te dejo, que te escucho como ida..
-Es que.. estoy.. bueno, que estoy ocupada, sacando a los perros.. -Contesté apartando de nuevo a María.
ME gustaba hacer la sufrir así, así que cansada de que me aparte la cara del cuello, decidí bajar un poco más, la tumbé de golpe, mientras ella hablaba con Jorge, y mordí sus ingles.
-Jorge, que.. verás.. Que tengo que colgar... -Dijo muy nerviosa-. Y colgó.
-Eres mala, muy mala. Imagínate que se me escapa un suspiro y se entera mi hermano.. -Dije besando me con ganas-.
-Tu tienes mucho control. Eres capaz de centrar te.. -Repliqué-.
Hicimos el amor fugazmente y nos levantamos de la cama. Nos arreglamos y empezamos el día. Llevamos a Chloe con su abuela y para disimular, le dije que me apetecía dar un paseo por la playa antes de comer en el restaurante que había reservado. Caminamos por la playa de la mano, sonriendo de oreja a oreja, muchos de sus fans nos pararon para hacer se fotos. Incluso vimos a lo lejos a un paparazzi.
-¿Sabes que si estuviéramos casadas, pasarían mas de nosotras, verdad?-Dijo María-.
-¿Porque crees eso? -Porque soy periodista, y se lo que vende, una vez casada es como que tu relación es más seria y no te van a fotografiar en un arrebato de pasión..-
un bonito paseo al sol con olor a sal. Hasta que hizo la hora de la fiesta sorpresa, y tras tomarnos una cerveza en la terraza, la llevé a la fiesta.
Al llegar, Escucho como Carla se empieza a morir de la risa, me giro a mirarla y le pregunto, a lo que me contesta.
-A esta casa rural, vine con una chica un fin de semana, una novia que me duró cuatro ratos.. -Dijo muerta de la risa-. Se me hace raro, acostar me contigo en la misma ara.
-¿Y quien te ha dicho que me voy acostar contigo? -Respondí muy digna-.
-Hombre, aquí restaurante no hay.. ¿Que otra opción hay?- Al decir esto me di cuenta de que María me había preparado una sorpresa, por su cara.. no sabe mentir-.
Lo que menos me imaginaba era, ¡ESA SORPRESA!. Estaban todos, todos mis amigos de Madrid y Málaga, toda mi familia y como no... me habían engañado Juana y Jorge, y ahí estaban. Me ilusioné mucho, por lo difícil que es por agenda, juntar nos todos, así que eso lo hacía el triple de especial. Celebré con ellos, con bebidas, champan, vino y comida, demasiada comida. Perdí de vista a María un segundo, tiempo después, las luces del comedor de invierno se apagaron y se abrió una de las puertas. Y ahí estaba ella. María subida encima de una moto preciosa, toda negra, con un lazo rojo enorme. Subida en ella y aguantada por Dani, se acercó a mi. Era gracioso ver a Dani sujetando le el sillín, como una niña con bici nueva, cuando le quitan los ruedines. Su cara de susto se fusionaba con mi cara de alegría.
-¡Es preciosa! ¡Estás loca! ¿Cómo me regalas algo así? Le dije sujetando el manillar.
María con torpeza se bajo de la moto y me subí yo. Le di gas y disfruté del sonido.
-Cómo llevas tiempo queriendo una.. Dani se compinchó conmigo, y me ayudó a elegir.. Por que yo, ni idea..-Contestó entre risas.-
La besé muy contenta y saqué la moto al jardín, no dude en dar me una vuelta con ella. Regrese a los minutos, con una adrenalina.. Pues le había dado bastante gas, y me fui por la carretera de curvas, algo flechada.
-¡El mejor cumpleaños de mi vida! ¡Gracias!
Recibí muchos regalos más, soy siento afortunada de la familia y amigos que tengo, su generosidad y su bondad. Me dan paz. Me regalaron una guitarra nueva, entre varios amigos. La creme de la creme, de las guitarras. Una Gibson Les Paul, preciosa.. y cara, también, esto no me gusto. No me gusta que la gente se gaste tanto dinero en mi. También me regalaron un vale para ir a un Spa muy famoso, en Barcelona, y equipación nueva para la moto. El día fue intenso. Demasiada felicidad para un instante..
-No me voy a poder dormir.. estoy demasiado feliz. Jo, ha sido insuperable. Mil gracias amor.. -Dije besando sus labios-.
-Estoy agotada, si. Ha salido todo genial, menos mal.. Estaba nerviosa.. -Contestó
-¿Que podía ir mal? Cuando te he visto subida en la moto.. bueno, bueno.. que fantasía. ¿Me dejarás que te enseñe a conducir?
-Ni loca.. -Vaaa, amor..-Besé su cuello-. ¿Si?
-Tu sigue insistiendo, lo mismo cambio de opinión, no te prometo nada..-Contesté mordiendo me el labio.-
Terminé de celebrar mi cumpleaños, de la mejor forma posible, enredando me entre las piernas de mi chica.

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Cuestión de piel
RomanceHistoria de amor entre dos chicas. Viven al máximo todas las emociones de forma muy visceral. ¿Te atreverías a descubrir más? Sumérgete en este libro, cada capitulo te enganchará más.