Destino Inesperado [Shadamy]

Capítulo 19

"¿Qué quiere de mí? Dígame cualquier cosa. Pero le ruego que haga lo que le pido"; decía un personaje de alguna película conocida mientras que Shadow y Amy veían con atención en el sofá de la casa del mencionado. La película llevaba a penas unos minutos de haber comenzado, y Amy estaba con un semblante grave debido a que la película era dramática. Por otro lado, Shadow sólo veía por obligación; de hecho, este quería estar junto a su eriza en su habitación haciendo "cosas", pero Rose lo convenció en ver la trilogía completa de la película el cual veían. El aburrimiento se apoderaba en Shadow, tanto así que a veces hasta llegaba a comportarse como un niño inmaduro.

Mientras Rose veía tan entretenida y conmovida por la trama y los increíbles guiones de la película, Shadow a veces se ponía a jugar con las púas de Amy. Otras veces le daba besos en el cuello para convencerla a hacer otras cosas, pero esta sólo lo apartaba.

— ¡Oh, vamos, linda! Hemos trabajado cinco días seguidos, ¡Cinco días seguidos de puros vuelos! —le decía Shadow a Rose.

— Y tenemos cinco días libres. No seas tan desesperado, Shad. —decía Rose mirándolo— Te lo recompensaré, en serio.

Un beso en los labios le dio Rose a Shadow después de haberle dicho aquello, pero este no estaba satisfecho. Un suspiró soltó Amy, aunque en realidad le encantaba que su erizo se porte así con ella a pesar de lo tan mayor que era. Una señales le hizo Rose a Shadow de que se eche en sus piernas, y este obedeció. Le dedicó Rose una tierna sonrisa a su erizo, y este comenzó a acariciar la mejilla delicada de su eriza.

— Estás preciosa.

— Gracias, pero eso tampoco me convencerá. —dijo Amy burlona.

— Rose, no lo hemos hecho desde hace dos meses. —dijo este avergonzado.

— ¡Rayos! ¿No te puedes esperar unas horas? —preguntó Amy.

— ¡Pero esa trilogía dura más de siete horas! ¿Por qué me haces sufrir? —decía el erizo negro.

— ¡Ugh, este erizo! ¿Es en serio? Sólo son siete horas. Sé paciente, o no obtendrás nada.

— Hay que darle una buena introducción a nuestros días libres, ¿No crees? Además, hay que aprovechar que Silver está con Mary y esas mocosas. —dijo Shadow.

Las palabras del erizo negro no fueron tan convincentes para Amy quien sólo negaba con la cabeza. Un suspiro con tristeza fingida emitió Shadow, llamando la atención de su novia. El erizo fingió seriedad mientras cerraba los ojos, y la joven Rose se alarmó; se sintió algo triste por no hacerle caso a su pareja, y decidió acariciarle las púas de manera tierna, y Shadow abrió los ojos rápidamente viendo ruborizado a su eriza.

— Oye, sólo espera, ¿Sí? —dijo Amy tiernamente.

— Hmph, está bien. —dijo este.

Entonces, la eriza le sonrió, y se acercó a sus labios para darle un beso tierno el cual fue correspondido por Shadow, y siguió acariciando de sus púas con rayas rojas. Luego, sus manos fueron al mechón blanco que este tenía en su pecho, y comenzó a acariciarlo, y a Shadow le encantaba ya que tenía una sonrisa dibujada en el rostro mientras se dedicaba a descansar.

Unos minutos la joven Rose estuvo así mientras veía la TV, hasta que llegó a una escena en donde la drama abundaba, y dejó de hacer sus actos en Shadow, haciendo que este abriera los ojos para ver si algo estaba pasando.

— Rose, linda, por favor, sigue. —pidió Shadow.

— ¡Shhh!

La concentración de Rose hizo reír un poco a Shadow, aunque también sintió algo de ternura ver sus facciones, parecía una niña viendo sus dibujos animados.