Capítulo 54

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El fuerte viento se hallaba muy fuerte que hasta era capaz de provocar un aterrorizante sonido que te dejaba la piel como la de una gallina. Por suerte, Rose estaba en el auto junto a Shadow, y se encontraban yendo ya a casa para descansar; claro, cada uno en sus respectivos hogares. Shadow estaba con sueño, pero hacía todo lo posible para no sufrir un accidente, y hacer a Amy llegar a casa a salvo. Sus facciones estaban muy graves, y las ganas que tenía de dormir lo hacían ver como un señor muy gruñón; esa era una de las razones por las que Amy no se atrevía a hablar con él, pues tenía miedo a que le respondiera tal y como lo hizo en la llamada por teléfono.

El silencio acompañaba a ambos mientras estaban en el vehículo; Shadow deseaba hablarle a Rose, y decirle que le gustaría ser su amigo, pero ahora no era su orgullo lo que no le dejaba hablar, sino que su miedo al rechazo. Pero también, Shadow era consciente de cómo le había dirigido la palabra a Amy: con mucho enfado. Es por ello que sólo optó por quedarse callado. Por el lado de Amy, esta se hallaba mirando las casas por la ventana del auto; aquéllas se veían muy lindas con las luces navideñas encendidas.

Rose sólo deseaba poder recibir un bonito año, pues sus emociones y sentimientos negativos la hacía pensar otra cosa, en pasar la Navidad sola, lo que es algo tonto ya que esta sabe muy bien que siempre contará con su madre y su hermanita. Entonces, pensando en aquella linda fecha, asimismo Rose se preguntaba si Shadow haría algo para ese día, pues se dio cuenta que no se veía tan interesado en esa fecha; así que optó por preguntarle a Shadow, pero primero quiso agradecer.

—Muchas gracias por haber ido a recogerme —agradeció tímidamente, mas Shadow no dijo nada—. ¿Estás cansado? Sabes, yo puedo manejar si quieres —ofreció Amy su ayuda, pero Shadow negó.

—No te dejaré que manejes mi auto —respondió sin emoción alguna.

—Está bien —dijo Amy nerviosa—. ¿Estás molesto conmigo? —preguntó tristemente.

Tras aquella pregunta, Shadow pensó unos segundos, y exhaló un enorme suspiro con cansancio y aburrimiento. Este le dedicó una mirada a Rose, y siguió con su camino; pensó en sus palabras para formular una respuesta la cual no humille a la joven, y con mucha sinceridad y demostrando sus sentimientos, dijo lo siguiente:

—Pensé que serías más consciente de lo que estamos pasando, Amy —Rose estaba confundida—. Acabamos de terminar un compromiso, ¿cómo quieres que nos hablemos? ¿Cómo quieres que actúe contigo? Yo estoy incómodo en este momento, ¿acaso quieres que te dé besos o qué? Sólo han pasado unas semanas, Amy, y te seré sincero, me duele que me hayas terminado porque te amo. Sé que quieres una amistad, y lo tendrás, pero tendrás que esperarte unos meses porque una amistad en estos momentos sólo me hará sentir más deprimido —Shadow se mantenía serio mientras conducía, y Rose estaba triste.

—Entiendo —Fue lo único que dijo Amy—. Sólo quería que seas amable —comentó desviando la mirada.

—Uh huh. ¿Quieres que sea amable contigo? No lo sé, espérate siete décadas porque superarte no será nada fácil —dijo molesto, y Rose sólo se quedó callada.

—Puedes ser amable conmigo aunque sea ahora sólo una amiga; no porque alguna vez fui tu pareja, significa que me trates mal y me hables con ese tono de voz —dijo Amy molesta.

—Qué delicada eres, linda —Tras aquéllo, Rose se ruborizó; pero Shadow no se dio cuenta que la había llamado de esa forma, pues era como una costumbre suya—. Mira, Rose, si te refieres a la llamada que tuvimos hace rato, lo siento, ¿sí? Perdón, andaba de mal humor, y sé que no es razón alguna para haberte hablado de tal manera, pero estaba muy molesto —se disculpó Shadow apenado.

—Está bien, te perdono —dijo Amy sonriéndole, mas él sólo siguió conduciendo.

Faltaba aún un largo camino para llegar a casa de la rosada, quien estaba decepcionada de sí misma; a veces creía que su decisión había sido en vano ya que de igual manera, siempre estará enamorada de Shadow. Pero si hubiera seguido con él y siguiéndolo perdonando, no sabría qué otras locuras iría a hacer, pues Rose, después de haber visto tantos errores y estupideces de parte de Shadow, ya sólo se esperaba una infidelidad de parte suya, y ella no quería llegar a esa parte; en pocas palabras, ya no podía tolerar más sus tonterías y la tremenda humillación que le dijo sobre su carrera.

Destino Inesperado [Shadamy]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora