Capítulo 62

228 53 30
                                    

Con los ojos levemente irritados llegó Rose a su hogar en donde ha vivido toda su vida; la casa de Vainilla. Aún se hallaba triste por haber recibido tales palabras hirientes de parte de Manic, y también confundida por no haberle respondido a Manic como siempre suele hacerlo. Estacionó su auto en el garaje, y bajó de él para ingresar a su casa. Eran las once de la mañana, y vio que no había nadie en casa, a lo que supuso que tal vez Vainilla esté comprando algunos alimentos y Cream en la escuela. Un suspiro exhaló tras sentir la casa muy silenciosa; puso su bolso en uno de los muebles de la sala, y se dirigió a su habitación para esperar a que ese desagradable sentimiento se esfume de ella.

Lo primero que hizo al llegar a su habitación, fue quitarse el uniforme, y colocarse un vestido color palo rosa, y unos zapatos cremas; ni bien se quitó dicho uniforme, lo depositó en una bolsa de basura mientras su molestia incrementaba, y lo puso en una esquina de su habitación. Ahora, sintiéndose azul como la tristeza, se acerca a su tocador, y observa su reflejo en el espejo el cual no había sido limpiado por muchas semanas. Amy suspiró triste, y se pintó levemente los labios de color rojo, y aplicó un poco de máscara de pestañas en las suyas. No se veía tan satisfecha, pero se retiró del tocador para echarse en su cama.

—¿Seré lo suficientemente bonita para ser su futura mujer? —se preguntó Amy a sí misma mientras miraba el techo.

Ni siquiera sabía la razón por la que tanto le había afectado los insultos de Manic, pero se sentía muy triste en esos momentos. Algunas lágrimas resbalaron de sus ojos, y optó por dormir para poder deshacerse al menos por unas horas aquel reciente pensamiento que no es tan bonita como para ser una novia ideal para Shadow. Entonces se durmió a los minutos, y a la hora Vainilla regresó a casa. La mujer podía sentir que había alguien más allí, hasta que vio el bolso de Amy que era de Stacy Collections, la marca favorita de la joven eriza.

Facciones de sorpresa de formaron en el rostro de Vainilla, y se dirigió hacia la habitación de la joven. Estando ya allí, esta ve a su querida hija echada en su cama, a lo que formó ahora una sonrisa; mas aquel detalle en su rostro desaparece lentamente tras ver a una Amy quejándose de dolor. La mayor se sienta al lado de Rose, la cual poco a poco se levantaba de su siesta, y se encuentra con su mamá. ¿Te encuentras bien, cariño?; le preguntó Vainilla tras ver a su hija con muecas de dolor en su cara, a lo que ella se negó.

—¿Qué es lo que te duele? —preguntó Vainilla, y Rose no estaba segura de responderle.

—El estómago. Tal parece que he comido algo que me ha caído mal —respondió con una mentira.

—¿Por qué regresaste? —Tras la pregunta de la mayor, Amy sólo agachó la cabeza—. ¿Tuviste problemas con Shadow? —La eriza se negó rápidamente.

—No se trata de él —respondió la de ojos jade—. Es sólo que me despidieron del trabajo —agregó, dejando a Vainilla sorprendida.

—Oh, pero ¿hay alguna razón?

—Sí, y es que hubo cambio de auxiliares de vuelo —respondió Amy.

—Bueno, cariño, no deberías sentirte así de triste porque de igual forma tenías que renunciar por el bebé; y esa aerolínea no es la única que existe en el mundo —dijo Vainilla con comprensión.

"Lo sé"; fue lo único que dijo la rosada ya que el hecho de que la hayan despedido no era la razón por la que se sentía triste, sino por las palabras de Manic; pero más allá de aquella razón, era un síntoma de algo muy triste que está por pasarle, mas esta lo está dando por alto sin darse cuenta que la aflicción que siente es de algo grave. Vainilla entendía muy bien que a Amy le gustaba su trabajo, y como creyó que su tristeza era debido a la pérdida del trabajo, pensó que era buena idea dejarla sola para que pueda sentirse un poco más cómoda.

Destino Inesperado [Shadamy]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora