A veces el enemigo es la persona que menos te los esperas y el mío es mi propia madre.
¿Por qué lo digo?
Porque ella me arruinó la vida.
Mi vida es así: mi madre fue una modelo mas cotizadas de todo el país y en una de sus pasarelas, conoció a mi...
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Peter.
Por fin voy a conocer a la hija de Nico y ver cómo ella actúa. Lo más importante es saber si es o no hija de mi padrino. Pero bueno eso no es importante todavía, primero tengo que conocerla para evaluar su conducta, no quiero cometer un error y decirle sobre la herencia.
Termino de cambiarme y espero a recibir un mensaje de Katherine para encontrarnos. Ayer también fui nuevamente a esperar a María y poder verla, pero ella no apareció, me molesta, pero también no sé si estará bien aunque espero que ella esté bien.
Siento mi celular sonar y rápidamente lo tomó. Leo el mensaje de Katherine avisándome en qué parte del centro comercial estarán. Le envío la contestación que voy en camino. Guardo todo y saco mi saco, me percató de la ropa que María dejó, me gustaría verla nuevamente para decirle que todo lo que compré es de ella y.... No puedo seguir pensando ahorita en verla, lo importante en este momento es conocer a la tal Mariana y ver si es o no digna de recibir lo que mi padrino le dejó.
Tomo las llaves de mi auto y salgo del departamento. Subiendo a mi auto, voy rumbo hasta donde se encuentran.
Logro llegar aunque no como yo deseaba ya que había mucho tráfico. Aparcando el auto; salgo y entro al lugar, caminó hasta dar con el lugar en donde ellas se encontraban y por fin las veo, aunque no podía ver el rostro de la hija de ella porque estaba de espalda, pero si logro ver a Katherine que me sonríe. Llego hasta donde están y digo:
— Hola Katherine.
— Peter que casualidad verte por aquí. — dice ella y se levanta rápidamente. — bueno ya que estás aquí quiero presentarte a mi hija. — se acerca a mi y me agarra del brazo. — Lali, hija. Él es Peter un amigo.
Veo como ella se levanta y gira hasta que por fin logro ver su rostro y la verdad ella no se parece en nada a Nico. Ella es muy diferente a él, ya que ella, aunque es algo alta y su pelo es castaño, y sus ojos son de color marrones. Ella me mira con una ceja arqueada al ver que la estoy viendo muy atentamente.
— Es un gusto de por fin conocerte Mariana.
— ¿Así que vos sos?
— Hija, ya te dije es un amigo.
— Claro, "amigos" de le dicen ahora.
— Hija, es mi amigo.
— Seamos sincero. Esto no fue casualidad, ya lo tenían planeado y dejen que les diga a mi me importa poco que se metan en la cama porque son asunto de ustedes, pero ¿no crees que él es un poco joven para ti? Digo ya que tú no eres una jovencita y usted ¿que? Le gustan las mujeres mayores por lo que se ve. ¿Qué edad tiene? Unos veintinueve o treinta años, aunque voy con la edad de veintinueve y déjeme decirle mi madre ya es una mujer mayor para que anden juntos.
Me quedo sin palabras al escuchar a esta mujer hablar así. Es tan horrible que alguien trate a su madre de esta manera, veo a Katherine y noto el rubor en sus mejillas.
