Un secreto se oculta bajo los suelos de tierra santa, algo oscuro y con un origen mucho más terrible del que se conoce, un niño encerrado que fue criado como monstruo, alejado de todos por ser hijo del ser equivocado, juntando rencor e ira contra aq...
HOLAAAAA! (toce escandalosamente por el esfuerzo de la voz) :)
Perdón la demora, se me había olvidado que les prometí un extra, no son largos, no más de una pagina de Word, a menos que me inspire más de la cuenta.
¿Cómo están? Espero que muy bien al igual que sus familias.
Este Extra está en el Instagram de LiKana (likanaescritora) junto con otros momentos de As, pero desde ahora subiré esto a todas las RRSS.
Bueno ahora les dejo esta joya. La primera vez que se vieron y la sensación de él cuando Lena llega al convento.
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EL DESEO INEXPLICABLE DE UN MONSTRUO.
¿Es normal esto que siento? Una sensación que me aprieta el pecho, no me deja dormir. No sé cómo desparecer esto, pero por más que intento no puedo. Intenté hasta golpear mi cabeza contra la pared, pero no sale de mi cabeza. Ella no sale de mi cabeza.
La recuerdo, la pienso, y cada vez que lo hago los latidos de mi corazón se incrementan increíblemente. Su cabello rojo está grabado en mis ojos, al igual que esos labios y esa mirada asustada con la que me miró. Sentí ganas de ir hacia ella y quitarla de aquel hombre que la tomaba en sus brazos mientras que de ella caían gotas por sus mejillas. Por eso corté aquella rosa que tocó, para poder beber de su esencia en aquella sangre que dejó en las espinas. Luego de eso la seguí, seguí su aroma y llegué a una casa muy grande, fui directamente a los jardines llenos de esas rosas, porque pensé que de allí venia su esencia, pero no. Fue entonces cuando sentí el ruido de algo siendo abierto y levanté mi cara hasta encontrar el origen. Ahí la vi, con unos ropajes sueltos y traslucidos que lograron mi pulso acelerarse aún más. Las gotas de sudor cayeron por mi cuello y mi frente a pesar del frío que había, y tragué duro cuando sacó su delicado cuerpo por la ventana para mirar la luna, pues la luz de aquella esfera en el cielo la hacían ver aún más apetitosa, la tela se apretó en algunas curvas que había en su cuerpo, e increíblemente sin saber que era aquello, me hizo sentir hambriento y desesperado. Gruñí para sacar esa sensación, pero no se iba, y noté como mi pantalón comenzaba a apretarme más.
Suspiré y tiré mi cabeza hacia atrás sintiendo el peso de aquellos recuerdos. Estaba otra vez en esta asquerosa celda. Amarrado mucho más que antes para que no volviese a escapar. Aquellos grilletes en mis manos estaban mucho más apretados, al límite de que se estaban formando coágulos en mis venas por la obstrucción.
Cuando la vi nuevamente hace unos días, pensé que había sido un sueño. ¿Qué haría ella en este lugar tan malo? Recuerdo cuando nuestros ojos se unieron, y las ganas hambrientas volvieron, no sé qué quería hacerle, solo sé que la necesitaba tocar. Su piel me llamaba a gritos. Pero eso la espantó y se fue, mientras que unos de los hombres que me lastiman fue tras aquello que me llamo la atención.
No supe más de ella, tampoco quiero verla más. No mentiré, si la quiero ver, pero me siento extraño cuando la observo pues me hace sentir débil, y con muchas sensaciones que no puedo descifrar porque ni siquiera sé cómo se llaman los sentimientos.
Actualmente, ya han pasado varios días creo desde que apareció, y que me volvieron a capturar. Mi cabeza cuelga débil de mi adolorido cuello, pero no puedo hacer nada. Entonces siento nuevamente su aroma, pero algo no va bien. Cierro mis ojos y levanto mi cabeza, sin importarme el dolor. Su esencia tan viva, está apagada y se mezcla con el olor a la sangre.
