Un secreto se oculta bajo los suelos de tierra santa, algo oscuro y con un origen mucho más terrible del que se conoce, un niño encerrado que fue criado como monstruo, alejado de todos por ser hijo del ser equivocado, juntando rencor e ira contra aq...
Hola Readers endemoniados! Espero que se encuentren muy bien y que ninguno lo esté pasando mal en este tiempo de pandemia. Ya les había avisado que me iba a ausentar un tiempo, pero creo que ya he vuelto, ademas que tengo un par de capítulos extra ademas de este que seguro esperan con ansias.
Bueno Readders, cuidense y mucho y pido perdon nuevamente por irme. Recuerden darle amor y comenten que parte les a gustado más.
Disfruten el cap.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Las manos firmes de As me sostienen fuerte desde atrás. No se ha quejado en ningún momento de la situación ni ha hablado sobre lo que le parece su primer viaje en caballo, aunque tampoco puedo pedirle que me diga algo ya que mi cabello ondea justo en su cara, rebelde como siempre, no hay caso de mantenerlo ordenado.
El caballo es bastante bruto en su galope, sin embargo, me contengo de reclamar mi dolor ya que no hay tiempo para detenernos, porque sólo nos separa una hora de nuestro pasado. Debemos correr, sobre todo debido a que aún es tiempo de que los zánganos que tiene el emperador sigan nuestros rastros. Por más que quisiera descansar y mantener mi cuerpo quieto para no prologar el sufrimiento, no puedo, aguantaré hasta que podamos estar más seguros y encontremos un lugar donde reposar antes de llegar a nuestro destino final. Por lo que mi tía ha comentado hay un lugar justo en medio de nuestro recorrido en donde la están esperando, será arriesgado, pero al menos no será el primer lugar en donde nos buscarán.
El camino está casi desierto, excepto por los árboles que nos rodean y alguna casa solitaria donde seguramente viven granjeros de esta localidad.
Las manos grandes de As están afirmando duramente mi cintura, causándome molestia, mas no dolor. Aunque tengamos capas de ropa separándonos siento la calidez de su pecho contra mi espalda y el cómo da suspiros cada vez que el caballo salta, también cuando sus apretones se intensifican lo que me hace estar más cerca de su cuerpo.
Recorremos un poco más cuando de pronto tía Karen se desvía del camino, va por detrás de una casa de madera que se ve humilde, saliendo del sendero y dejando de galopar. De inmediato la sigo, sin rechistar.
—¿Qué sucede? —Le digo preocupada, al llegar a su lado. Con su dedo me indica que haga silencio para luego apuntar hacia el horizonte, justo en donde se ve la última parte del tramo antes de una pequeña loma. Allí varios caballos galopan a todo lo que les da, mientras sus jinetes los golpean con fustas y gritan para apurarlos.
Con cuidado, y sintiendo que el agarre de mi amigo se intensifica en mí, me arrimo más hacia el lateral de la casa quedando tapada momentáneamente de aquellos extraños.
Sentimos cada vez el sonido más cerca y cuando pasan nos damos cuenta de que efectivamente son enemigos. Einar en un traje completamente negro va de cabecilla del grupo, mostrando que está más que dispuesto a cumplir lo que su padre le ha ordenado, en su rostro va plasmada la determinación.
