Mi Mala Influencia / Jean , Libardo #Liean #Terminada/ haciendo algunos cambios

Capitulo. 11

Libardo y Jean estaban afuera de la dirección en espera de que el director los llamara. Libardo tenía su mirada fija en el suelo con los puños apretados mientras Jean lo miraba.

— Puedes dejar de mirarme me das asco.—dijo Libardo apretando su mandíbula.

— ¿Porque? me gusta esta nueva faceta tuya.— dijo con una media sonrisa mientras se acomodaba en la silla.

— Solo soy un puto juego para ti.— dijo Libardo con rabia.

— Algo así, pero esta acción tuya de ahora, me encanto, porque nunca mostraste las garras como ahora?.— Jean lo miro nuevamente.— Tienes una buena mano.— Se toco él labio.

La puerta de la dirección se abrió y Carlos salió con una mirada seria y el director le indicó a los dos que entrarán a lo que estos dos hicieron caso.

— Como sigue joven Leon.— dijo el director sentándose en su silla.

— Recuperándome, pero con estos golpes que recibí no lo haré rápidamente.— Dijo Jean echándole una mirada fugas a Libardo.

— Quien fue el que golpeo primero?— el director los miro a los dos y Jean solo miraba a Libardo.

— Fui yo.— contestó con voz fría.

— Porque razón señor Libardo.

— No importa el por qué, simplemente dígame cual será mi castigo.— contesto él serio.

— Es la primera vez que lo tenga en mi oficina, ustede siempre a sido un estudiante modelo, que le ocurrió?— Libardo no respondió— Como ninguno de los dos; mejores dicho ninguno de los tres quiere decir el motivo de su pelea, los tres estarán en detención por dos semana y los fines de semana harán servicio comunitario menos Jean.— Dijo el director.

— ¿Que, Pero porque para tanto? apenas y lo toque y Carlos ni siquiera pudo golpearlo.— protesté.

— El joven Jean acaba de salir de recuperación y así es como lo reciben y además nuestra institución es una de renombre tanto en el pueblo como en el país así que no me puedo permitir tales patrañas.

— Ahora no las va a permitir.— sonreí indignado y lo dije en su susurro. Jean y el director me miraron.— Si ya no hay nada que decir me puedo ir a mi clase?.— lo mire y el director asintió con la cabeza, me levante y Jean lo hizo a la misma vez que yo.

Caminábamos de regreso a clase sin decir nada el uno al otro, la dirección que daba al otro lado del campus en el cual teníamos clases, así que nos deparaba largo camino de aquí halla.

— ¿Cuanto le pagaste al director eh!?.— dije serio— para que de la nada nos castigue así y tú quedes salvado del servicio comunitario.

— Eso no es de tu incumbencia.— Contesto el a mi lado.

— O sea que si le pagaste.— dije sin mirarlo.

— Puede que si tanto como puede que no.— Jean se interpuso en mi camino, lo iba a rodear pero él no me dejó.

— Te quitas o te quitó.— lo mire a los ojos.

— Inténtalo.— dijo sonriendo pero con una mirada amenazadora la cual ya no le temía.

— Te recuerdo que tienes un brazo enyesado y un omoplato en recuperación.— Le mire.

— Acaso es eso una amenaza.— Jean frunció su ceño pero con una sonrisa añadida.

— Puede que si tanto como puede que no, así que muévete, ya eh tenido suficiente de ti y lo único que deseo es estar lo más lejos de ti.— Al ver que tenía la guardia baja, lo rodeé y camine rápido para alejarme de él.

— Te recuerdo que estaremos dos semanas en detención, tus deseos no se pondrán cumplir.— le escuche decir atrás de mi.

Al llegar al salón entre y le di mi nota de que estaba en la dirección al profesor que en partía la clase en aquel momento, unos minutos después llegó Jean. Yo me senté con Matt y el con Darian, la clase siguió con Jean mirándome ya que podía sentir su maldita mirada encima mío, no sé cuál es maldito problema ahora que volvió, en vez de regresar de esa escuela mejor está peor que nunca.

— Los castigaron muy feo?.— dijo Nicole al lado de Carlos y de mi.

— No puedo creer que me perdí ese momento, tanto tiempo esperando que Libardo se revelara contra ese idiota y el día que lo hace llego tarde a la escuela— dijo Josh golpeando su frente.

— Ya, no hablemos más de eso, tengo hambre vamos a la cafetería.— Camine rápido.

— Que le pasa?.— dijo Nicole.

— Nos castigaron dos semanas en detención y los fines de semana tenemos que hacer servicio comunitario menos Jean.— contestó Carlos.

— Pero porque un castigo para tanto, si igual tú ni tocaste a Jean.— dijo Nicole.

— El pobre ya estaba castigado en su casa y ahora también en la escuela.— respondió Carlos.

— Pero esperen explíquenme porque Libardo lo golpeo, yo de ser el que siempre sabe todo, ahora no sé nada y me siento raro así que desembuchen.— dijo Joshua

— Jean le dijo a su madre que él antes lo golpeaba y molestaba y pues ustedes saben la relación tan cercana que tienen Libardo y su madre que nunca se ocultan nada y él al ocultarle algo como esto y sufrir en silencio le dolió a su madre.— Les confesó Carlos.

— Mierda! Pero qué diablos tiene Jean en la cabeza, que ganaba él diciéndole eso a su madre.— Josh respondió.

— Y lo peor es que todo eso de las disculpas era falso.— esta vez contestó Nicole.

— Debieron haberle dado más duro a ese cretino.

— Me lamentó no haber podido darle su merecido a ese estúpido.— Carlos siguió caminando en dirección a la cafetería.

Los Chicos entraron a la cafetería y todos miraban a Libardo pero este los ignoró por completo, con un semblante serio camino hasta el bufé de la cafetería y se sirvió, al haber hecho esto camino a una mesa que estaba en el centro de la cafetería y espero a sus amigos que llegaron con sus charolas unos minutos después.

— Te diste cuenta que ahora eres más popular gracias a mi.— Escuche su estúpida voz atrás de mi.