Cap.23

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Narra Jean*

Llegue a la casa y me baje del uber, entre y me tope a mi hermana en el living.

— Vamos.— me tomo del brazo y me regreso a la salida.

— ¿Qu- que ... a donde me llevas?.— me solté de su agarre.

— Imagine que lo habías olvido.— dijo ella rodando los ojos.

— ¿Olvidar que?.— la miré confundido.

— Hoy te quitarán el yeso tonto.— me golpeó en la cabeza.

— Aush Malexa.— me sobe y la amenacé con la mano.— Creí que era la siguiente semana.

— Ya sube al auto.— camino al estacionamiento y yo la seguí.

— Ya deja de golpearme, ya no soy un niño.— le dije caminando a tras de ella.

— Sigues actuando como tal y mientras lo sigas siendo te seguiré golpeando.

— Recuerda que soy más fuerte y grande que tú.— dije ya estando junto a ella.

— Me acabas de amenazar Carlos?.— ella me miró.

— Si, si y que?.— le saque la lengua y entre al auto sentándome de copiloto.

— Este mocoso.— rodeó el auto y subió.

— Enserio no sé cómo es que te soporto.— Dijo ella prendiendo el auto.

— Por lástima.— le conteste mirando a la ventana y ella solo me miro.

— Deja de hablar estúpideces.— me volvió a golpear en la cabeza y la miré serio.

Ya estábamos en el pueblo y yo solo me disponía mirar  por la ventana.

— ¿Ese no es Libardo?.— dijo Mae apuntando y yo miré, él estaba con la misma chica de la mañana, estaba riendo y molestándose.— ¿Es su novia?.— dijo cuando los pasamos y yo me quedé mirándolos ¿realmente es su novia?.

— Claro que no.— dije molesto y mirando al frente.

— Ten cuidado con tus sentimientos Jean.— dijo ella.

— ¿A que te refieres?.— la miré confundido.

— ¿Me crees tonta?, no creas que no te vi cuando Libardo estuvo en casa ,  es más que obvio que te gusta.

— Tu ... ¿como?.

— ¿Que como lo descubrí?.— me interrumpió ella.— Te conozco como la palma de mi mano y por eso te digo que tengas cuidado.

— ¿Porque lo dices?.— la miré confundido.

— Se lo celoso y posesivo que puedes llegar a ser y además que eres muy caprichoso y si mamá se llega a enterar.— la interrumpí.

— No lo hará.

— Pero si llegase a pasar, sabes que mamá podría hacer lo que sea para que ustedes dos no estén juntos.— termino ella.

— Igualmente el no siente nada por mi y si en algún caso llegase a pasar lo que acabas de decir, ya no soy un niño para dejarme manipular de esa bruja.

— No formemos la tercera guerra mundial entre tú y mamá ¿si?, ustedes dos son tal para cual y se que ninguno se dará por vencido si empiezan una guerra.

Me quedé callado, ya no quería hablar del tema, llegamos al hospital. Mae y yo bajamos del auto y entramos al gran edificio, me revisaron el hombro y quitaron el yeso.

— Mueve el brazo con cuidado.— indicó mi padre y  eso hice pero sentí mucho dolor.— El brazo, no el hombro, la lesión en tu hombro aún no a sanado del todo pero va muy bien.

Mi Mala Influencia / Jean , Libardo #Liean #Terminada/ haciendo algunos cambios Donde viven las historias. Descúbrelo ahora