Cap 66

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Todos me miraban, todos menos Trey, no esuchchaba nada de lo que decían, pero solo sentía un mareo extraño y ese pitido molesto otra vez en mi oído, hasta que sentí que unas manos me agarraban el brazo.
-Eh Eva! -Me dijo Laura haciendo que la mirase.
-Esto... yo... -Dije sin saber que decir.
-Es eso verdad? -Me preguntó Kathy entonces.
-Osea... que tienes diecisiete? -Preguntó entonces Marc.
-Oye Trey y tú lo sabías? -Preguntó entonces Laura a Trey.
Eso era un "Por favor, trágame tierra y no me dejes volver a ver la luz del dia".
-Nos vemos el lunes chicos. -Dijo Trey.
-Espera, todavía no nos enteramos de nada! -Dijo Laura.
-No hay nada de que enterarse Laura. -Le contestó el.
Nos levantamos de la mesa y caminamos a paso rápido hasta la salida. Yo estaba noqueada, no me sentía bien, levemente mareada y el dolor de cabeza había vuelto a mi como un mal recuerdo. Le había dejado todo el marrón a Trey y yo como si nada.
-Perdon Trey, yo... -Intente decir mientras caminábamos hasta su coche.
-Estas bien? -Dijo entonces.
-Si... solo que me tomo por sorpresa...
-Como coño habrá llegado eso ahí.
-Era de esperar Trey. -Dije lo más sincera.
Se puso una mano en la frente, supongo que de desesperacion, y yo simplemente estaba sumida en mis pensamientos.
Me preocupaba que le pasara algo a él, que al enterarse todo el mundo le dijeran algo a él por estar conmigo, pero yo no sabía como hacer para ayudarlo en eso.
-Igualmente puedes pagar cualquier fianza. -Dije sin enterarme.
Y de verdad fue así, era algo que tenía completamente guardado en una esquina de mi cerebro, algo que yo nunca le diría, pero ahí estaba yo, pensando en voz alta.
-Joder Eva, y eso que importa? -Dijo casi gritando.
-Pues que a ti no te pasara nada, así que puedes estar tranquilo. -Dije sincera.
-¡Lo que me preocupa eres tu joder! -Dijo en grito.- ¡¿Cuando te darás cuenta de eso?!
No estaba de humor, tampoco tenía la paciencia suficiente. En situaciones normales le hubiera dicho que no pasaba nada, que buscaríamos una solucion, pero una nubla muy espesa cruzaba mi mente y era imposible ver en ella.
-¡Yo te dije en su momento que quería que lo nuestro fuese solo para nosotros Trey, o ahora dirás que no?! -Le dije en su mismo tono.
-Ahora no me vengas con cuentos de hace tiempo Eva! -Me contestó.
-Sabes por que lo digo? -Dije acercándome a él, complétame cabreada.- Porque si no hubiera sido por tu tozudez, nada de esto hubiera pasado. Tu eras el que quería que lo nuestro fuese para todos los públicos!
-No es mi puta culpa que seas una cría queriendo jugar a los trabajos!
-Ah, pero tampoco es tu culpa aceptar encantado a esta cría, verdad?
-Que tú te hayas querido meterte en mi cama no es cosa mía. -Dijo y me quede muda.
Habían muchos Treys que conocía. Estaba el aburrido, que actuaba mudo y de mal humor, el Trey tozudo, más que una mula, el tímido que era el más tierno de todos, también el serio y el cariñoso, pero ese que estaba viendo en ese momento era nuevo, era uno completamente diferente, un Trey que no solo estaba emfadado, sino que pasaba más de eso.
-Eres un hijo de...
-Adelante, sigue con lo que estabas diciendo cría.
Me acerqué lo suficiente y le mire a los ojos.
-No quiero que te me vuelvas a acercar entendiste? -Le dije con voz calmada pero agresiva.
Agacho la cabeza y se puso un poco a mi altura.
-Tu, no te me vuelvas a acercar. -Dijo con una voz desconocida para mi.
Sentí un pinchazo en el estómago insoportable y unas ganas de llorar increibles. Ese no era mi Trey, ese no era el Trey cariñoso que me decía "Todo estará bien" o "No te preocupes por ello". El no era el que conocía.
Cogí todos los impulsos y la rabia que tenía y le di una buena patada en los huevos. Estaba enfadada, emfadada y triste, y no me quede ahí para ver como se retorcía, simplemente me di la vuelta y me fui.

Tras nuestra supuesta verdadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora