Capítulo 5: Llamada con Ezequiel

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A la mañana siguiente

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A la mañana siguiente

Luego de hacer mi rutina diaria en el baño, abro la puerta y comienzo a caminar hacia la sala. Camine por toda la casa en busca de mi familia, pero no había nadie. Hoy era Domingo y de seguro deben estar todos en la misa. De inmediato me dirigí hacia la cocina y tomé un taza de café. Luego abrí el microondas y pude ver un plato servido. Sí, mi madre me había dejado el desayuno hecho, pero pensaba que no. Comencé a calentar el revoltillo, mientras tomé dos tostadas de pan y le colocaba mantequilla. Camine hacia la mesa, coloque el plato y mi taza de café. En ese instante me di cuenta que había dejado el celular en la habitación, entonces caminé de vuelta a la habitación y tomé el celular. Luego regresé nuevamente al comedor y me senté en la silla. Desbloqueé el celular para ver video mientras comía y me percaté de la cantidad de llamadas perdidas y mensajes de texto. Comencé a leer los mensajes de mi madre y de Abigail, pero en ese preciso momento suena el móvil. Oh Dios, al ver de quién se trataba provocó que me pusiera nerviosa y comencé a dudar si debía o no contestar.

Llamada con E

-¡Hola! –conteste algo tímida.

-¡Buenos Días, Valentina! Espero que hayas descansado bien y que no te moleste que te llamará tan temprano. –escuche a Ezequiel por la otra línea.

-Ya estaba despierta.

-¿Qué haces?

-Estoy desayunando, ¿por qué?

-Quiera verte, aunque sea un momento. -confesó y sonrió.

-No puedo salir, recuerda estoy castigada.

-No te estoy diciendo que salgas, me conformo con verte mediante una videollamada.

-No. –Solté de golpe.

-Lamento si te incomodé, pero...-lo interrumpí y avance a corregir mi pensamiento.

-Claro que podemos hablar por cámara, pero no ahora. Oye, apenas acabo de levantarme y no estoy arreglada; cuando me vista, te llamo. –dije y pude escuchar una risa de su parte.

-¿Te vas a poner linda para mí?–me pregunto y entonces me sonreí. Gracias a Dios que no me puede ver el rostro, porque de seguro debía estar muy sonrojada y me avergonzaría.

-Sí, pero déjame terminar de comer.

-Estaré esperando tu llamada y buen provecho.

Llamada finalizada con E

Debo estar soñando, esto no me puede estar pasándome a mí y debo ser una broma. Rápidamente observé el reloj de la pared para ver la hora justo las 10:00 am, pero tengo que apurarme para no hacerlo esperar mucho por mí. No puedo creer que lo vaya a ver mediante una videollamada y eso sería muy emocionante para mi.

Dos Pequeños DeslizDonde viven las historias. Descúbrelo ahora