Valentina
Una semana y cuatro días después
Estos últimos días pasaron demasiado rápido, porque ya había comenzado a trabajar y me tocaba ir cuatro días a la semana. Los días que me toca ir son los: Martes, Jueves, Sábado y Domingo. Porque Derek me había dejado un día de por medio para que yo pudiera dedicarme a mis estudios y también para que pudiera descansar.
Él estaba siendo demasiado considerado conmigo; pero solo me dijo que era por mis estudios y por mi embarazo. Hasta ha habido días en los cuales me ha regresado a casa a la hora de la salida y con mi mamá no ha habido problema porque lo conoce. Si no lo conociera, no me hubiera dejado subirme a su carro y prefería ser ella misma la que me recogiera.
En el día de hoy tenía dos exámenes: uno de historia y el otro de español. Al finalizar las clases me tocaría ir a trabajar y la verdad era que me estaba gustando mi trabajo. La razón principal porque estaba lejos de casa y saldría a algún lugar que no sea mi casa. Desde la última vez que me vi con Ezequiel, hemos mantenido comunicación más seguido por mensajes de texto y como dos veces hemos hablado por llamada.
Porque no hemos tenido la oportunidad de vernos fuera de la escuela, ni en la biblioteca y solo nos hemos podido ver en su clase. El timbre sonó indicando que era la hora del almuerzo y tomé mis pertenencias del pupitre para guardarlas en mi mochila. Luego me levanto y camino con mis amigas hacia la salida del salón. Al llegar al salón comedor cada una tomó su almuerzo y nos dimos la vuelta para caminar hacia la misma mesa de siempre.
-Chicas, ¿tienen planes para mañana por la noche? -Hablo Isabel, en cuanto todas tomamos asiento en la mesa.
Mis amigas y yo comenzamos a observarnos confundidas entre sí hasta que Antonelli y Abigail hablaron al mismo tiempo.
-Yo no, ¿por qué? -contestaron.
Yo por mi parte comenzaba a llevarme cucharadas de espaguetti a mi boca, porque ya tenía demasiada hambre y mis tripas no paraban de hacer sonidos extraños.
-Mañana habrá una pijamada en mi casa y podrán quedarse a dormir. Mi papá ya me autorizó y mi abuela Ines se quedará con nosotras. -Hablo Isabel.
-Yo iré. -Hablo Antonelli.
-Cuenta conmigo. -Hablo Abigail.
-¿Y tú Valentina? -me preguntó Isabel y yo tragué muy hondo.
-A Valentina no la dejarán quedarse porque su madre es muy estricta y desde que somos mejores amigas nunca la ha dejado quedarse en mi casa. ¿Verdad Valentina? -Hablo Abigail y le asentí de inmediato.
-Abigail tiene mucha razón chicas y además, aún no me han retirado el castigo de no salir de casa. Solo tengo el permiso de salir al trabajo o a la escuela.
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Dos Pequeños Desliz
General FictionConoce la historia de Valentina, una niña de tan solo 18 años. Para celebrar su cumpleaños número 18, decidió ir a un bar a pasarla bien junto a su mejor amiga y su hermanastra. Esta niña, esa noche conoció a un hombre mayor. Esa noche en el bar est...