¡Princeso! - C.V y tú | Terminada

29|Mírate y mirame

Me estacione y rápidamente me baje de esta, me acerqué a la puerta y toque fuertemente, a los pocos segundos abrieron la puerta, era Alicia.

-¿Cómo pasó eso?- le pregunté.

-Zabdiel y yo veníamos de la biblioteca, estábamos estudiando. El se ofreció a venirme a dejar a mi casa y acepte. En el camino, a una cuadra de mi casa, lo vimos y como mi casa estaba a nada, lo trajimos aquí, ¿Deberíamos llevarlo al hospital?.

-Déjame verlo.

-Vamos, esta arriba con Zabdiel.

La seguí, entramos a una habitación de huéspedes y ahí estaba, recostado y se le notaba mal. Me acerqué a el y le acaricie el cabello, me dio una sonrisa que me derritio el corazón. Si necesitaba ir al hospital.

-Zab- lo mire- ¿Tienes el número de su madre?.

-Si lo tengo- respondió.

-Llamala y dile que venga, no puede quedarse así, tiene que ser revisado por un doctor y tal vez suturar algunas heridas.

-Ya mismo- dijo Zabdiel sacando su celular y comenzando a caminar hacia la puerta.

-Yo voy contigo- le dijo Alicia siguiendolo.

Ambos salieron. Nuevamente volví a mirar a Chris, me sente en el espacio de la cama que quedaba.

-¿Cómo te sientes?- fue lo primero que quería saber.

-Nada bien- dijo riendo.

-¿Qué paso?.

-Jason.

Rápidamente sentí como el enojo me recorrió de pies a cabeza, apreté mis puños conteniendo el enojo y las mil maldiciones. Hijo de perra.

-Idiota- murmure.

9:30 pm
-Christopher

Salí un poco a caminar y pensar en muchas cosas, que digo, lo único que pensaba era en Tn y sus labios. Desde lo que paso no dejo de pensar en ello o más bien, en ella. También pensaba en lo que podría haber pasado si ese carro no nos detenía.

Metí mis manos a los bolsillos de mi sudadera, hacia bastante frío. Hace unos pocos minutos había pasado la casa de Alicia y estaba todo apagado, tal vez estaba con Tn, ¿Ya le habrá contado? No lo se.

A lo lejos pude apreciar como una bolita de hombres se acercaban, pero no lograba ver quienes eran. Seguí caminando hasta que pude ver sus rostros, Jason y sus idiotas. ¡Carajo!. Opté por ignorarlos, pero al parecer ellos no a mi, sin precio aviso se abalanzaron sobre mi, sin siquiera poder reaccionar ya me tenían entre todos dándome golpes que me sacaban el aire. Sólo podía sentir el ardor y dolor de los golpes, claro que trate de defenderme pero eran más que yo, sólo pude darle un puñetazo a Jason en el labio, haciendolo sangrar. Estaba débil y sentía como todo me daba vueltas. Jason me tomo de la sudadera y me hizo verlo cara a cara.

-Si crees que voy a permitir que te metas con lo que es mío, estas muy equivocado, imbécil. Y si, hablo de mi, Tn.

-Ella nisiquiera te quiere- le dije riendo.

Estampó otro golpe en mi cara.

-¿Y crees qué a un niñito como tú si?- se rió- esto es una pequeña muestra para que te quede bien en claro que ella es mía y de mi propiedad.

-Ella no es ningún objeto para que tú te adueñes de ella. Déjame decirte que ella no es de nadie, es sólo de ella misma.