41|A la cabaña

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3 días y Christopher no se para por la escuela, me parece sumamente extraño y lo peor es que nadie sabe nada, eso me está sacando de quicio.

Debía admitirlo, no la estaba pasando bien, a decir verdad, lo estaba pasando horrible. Sentir su ausencia era inexplicable, necesitaba oír su voz, su risa, sus chistes, necesitaba ver sus ojos, necesitaba ver su sonrisa única y linda. Lo extrañaba y eso me jodia, mi propósito era alejarme pero eso se me esta haciendo casi imposible, no creo poder soportar verlo diario sin siquiera saludarlo y querer sentir el más mínimo contacto, tal vez un roce de manos o el contacto más afectuoso como un abrazo, incluso desear hasta sus besos que ya los extrañaba, casi tan adictivos como la droga.

Necesitaba saber una cosa, la más mínima, donde estaba o si esta bien. No he podido ver a su madre ya que trabaja y no tengo ni la menor idea en que o en donde. Tampoco abren cuando toco la puerta. ¿Donde putas estaba?.

(...)

4 días.

5 días.

6 días.

Volví a insistir pero Incluso mis llamadas ya ni le llegaban, no tenía señal o ya había apagado su celular. Cada día lo extrañaba más y cada día me preocupaba por el, incluso me sentía aterrada el solo pensar que jamás lo volveré a ver y nunca pude despedirme.

Alicia me había dicho que había encontrado una persona que probablemente sepa de él y su paradero, me cito en su casa y no dude en ir.

Toque la puerta de su casa esperando que ella abriera, no tardó mucho cuando escuche sus pasos. Abrió la puerta y ella me sonrió, antes de caminar hacia la sala donde estaba la persona me detuvo.

-Quiero aclararte algo antes- me miró y yo asentí- conocí a esta persona ayer y no tenía ni la más mínima idea de quien era, a lo que voy es que... No seas grosera ¿Esta bien? Es la única persona que sabe donde esta y de echo es una persona muy agradable, escuchala sin importar quien esa ¿Ok?.

Asentí confundida, me tomo del brazo y me incitó a avanzar, me adentre en su casa y comínamos hacía la sala y al ver quién era, me quedé parada en la puerta instantáneamente. Llevaba un vestido blanco de manga larga y hombros descubiertos, unos 5 dedos arriba de la rodilla, cabello suelto y con un maquillaje super natural pero que le quedaba muy bien ¿Esta tipa va a una fiesta o qué?.

-Hola- me saludo en cuanto me vio.

No debía ser grosera aunque quisiera serlo, Alicia me lo pidió y también ella sabe respuestas a mis preguntas.

-Hola- le contesté acercándome y sentandome en el sofá.

Alicia me siguió y se sentó alado de mi.

-Después de todo por fin te conozco aunque, no eres prima de Christopher ¿No es así? - hablo con cierta amabilidad, no lo había dicho en mal plan y eso se notaba.

-No, no soy su prima.

-Lo sospeche desde que el no no respondió mi pregunta en sí eras su prima o no, de echo me dijo que eras una persona ocupada pero yo se que más bien lo dijo porque seguramente no me quisieras conocer...

-No creo que...

-¡Hey! - me interrumpió- no hay problema, escucha, yo se que no te caigo muy bien y puedo entenderlo, después de todo soy la ex y tú lo quieres a él.

No sabía ni que decirle, ella era la chica que el quiere y ella aun lo quiere ¿Mentir o la verdad? ¿Qué será mejor?.

-Tomaré tu silenció como un si, pero esta bien. Yo no vine aquí porque sigo sin superar a Christopher.

¡Princeso! - C.V y tú | TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora