Capítulo 28 🍎

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Becca

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Becca.

—De verdad lo siento, Becca.

—Cállate, o juro que te hago bajar del auto para atropellarte.

Violett traía cara de perro regañado.

Y sí, llevaba desde que apareció en mi casa diciéndole mil y un cosas por su repentina idea. También porque había logrado interrumpir lo que estaba haciendo con Christopher, otra vez.

No sé qué tenía, pero siempre aparecía en los momentos exactos en los cuales no debía aparecer la muy maldita.

Resulta que el rubio fue a verla a su casa, estando Richard ahí, eso no debería ser un problema, los dos son mayores, en especial Tristán. Pero el viejo es protector con su única hija. Tristán la invito a cenar apenas abrió la puerta, pero a quién se lo dijo fue a su casi suegro.

Me hubiera encantado estar ahí para grabarlo y luego reírme del rubio.

Al principio nos llevamos bien, pero ahora descubrimos que nuestra relación es de amor-odio, me encanta molestarlo desde que se ve con mi mejor amiga.

La cosa es que Violett le dijo a Richard que iba a ser una salida grupal, que también iba a estar yo, porque claro, Violett no tiene otra mejor amiga tan perfecta como yo. Y para no ser el mal tercio en esos dos idiotas, Tristán invito a Christopher.

Más bien, prácticamente nos obligaron.

No me molestaba salir con ellos. Pero no era un buen momento para hacerlo.

Roxanne el día anterior había decidido drogar al castaño para vaya a saber qué cosa, y yo estaba con ganas de querer matarla.

Luego de revisar las cámaras de la universidad, a las cuales logre acceder pude ver algo de lo ocurrido, y borrar cuando Violett y yo subimos a Christopher inconsciente a mi auto por las dudas.

—Descubriste algo, ¿verdad?

Sabía a lo que se refería, así que asentí.

—Fue Roxanne, le puso algo en el café que Christopher estaba por tomar.

—¿Y qué harás?—indagó—. Hay que encontrar una manera de que su presencia ya no sea una molestia.

Ladee una sonrisa, esa era un pregunta realmente tonta.

—¿No es obvio? Asesinarla es la única opción.

Violett se me quedó mirando fijamente, al parecer mi broma no le hizo gracia.

Regresé la mirada al camino, rodando los ojos.

—Becca...

—No voy a hacerle nada—aclaré—. Por el momento no, pero ya veremos si sigue viva.

Ambiciosa Atracción © ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora