Becca.
Ya era la mañana del domingo.
La tormenta continuaba fuerte fuera del lugar, por lo que aún no podía marcharme de la casa de Christopher.
Luego del sexo nos fuimos a dormir, pero en vez de hacerlo inmediatamente, me quedé pensando un buen rato en las palabras que había dicho.
«Sé que tu corazón me pertenece, Becca».
Esas estúpidas siete palabras rondaban en mi cabeza desde que las dijo.
Aunque no eran tan estúpidas. Si estaba segura de que me gustaba, pero no estaba segura de si le podría entregar todo mi carriño de esa forma. Nunca había tenido un novio formal, no uno al que le dijera que lo amaba.
Ni siquiera Adam.
Me eché hacia atrás en la cama, como necesitaba los consejos de Violett en este momento.
Christopher hace rato que se había despertado y levantado, lo único que sabía era que estaba en la cocina haciendo no sé qué cosa, pero algo estaba preparando. Se escuchaban cajones ser abiertos, utensilios caerse y más.
—Violett, idiota, que me dejo sola con él—exclamé.
Rodé en la cama, enrollando las mantas en mi cuerpo. Mi cabeza no dejaba de dar vueltas a todas las cosas.
Jake estaba en la ciudad.
Ahora todos sabían que era mi prometido.
Mis padres no tardarían en llegar.
Christopher necesitaba respuestas, y yo tendría que darlas, para luego golpearlo por su comportamiento.
En la noche anterior cuando vi sus fotos de cuando era más joven me dieron ganas de llorar, yo no quería que estuviera enojado conmigo. Pero no sabía cómo tratar el tema del compromiso, por lo que trataba de no pensar en eso.
Pensaba decirle antes de que Jake estuviera aquí, pero las cosas se salieron de control, de mi control. No estaba planeado, y lo detestaba, porque llevaba planeando el reencuentro desde que me fui de casa.
Maldita sea.
—Tengo que asesinarlo, es la única manera de deshacerme de él—dije a la nada.
Se me ocurrían muchas maneras de quitar a Jake de la faz de la tierra, muchísimas, cada una era peor que la otra, y tan deliciosa para mí.
Y también debía deshacerme de ella...
Violett me había dicho que no, pero... ella no tenía porqué enterarse de cada acto que haga. Si lo hacía, ya no habría problemas.
Tal vez no tenía que hacerlo yo, con un simple accidente de auto, avión, secuestro anónimo que termine en una muerte podía ser suficiente, simple, rápido, y yo no terminaría incriminada con nada.
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Ambiciosa Atracción © ✔️
RomanceIntrépido Amor #1. Becca Edwards es una carismática, dominante e intrépida joven con un pasado misterioso el cual la atormenta en secreto. Una noche antes de regresar a clases en la universidad, mientras espera a que su mejor amiga salga de su trab...