Once Upon A Dream,......

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Esta mini historia se me ocurrió con mi hermana y el consumo de dulces antes de dormir.
Niños no coman dulces antes de dormir que luego caen pesado o ¿Solo será a mí?

Esta Historia los protagonistas serán las bendiciones de Bruno Buriarty si hablo de Karla, Diego y Jouta.

Si no saben de ellos vayan a las fichas dónde está su información especial. Sin mas disfruten de la historia.

lalocadelyuri101 

me gustaría dedicarte a ti este primer capítulo por crear tan buen material e historia con tus ocs y si te gusta déjamelo saber y deja tu bello comentario o voto.

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El patio de la familia Buriarty estaba ahora ocupado por los hijos del mismo señor.

Juguetes y topers de comida estaban sobre un mantel en el cesped fresco de la tarde. Las risas y el ruido generado por sus pies eran la muestra de su viva presencia.
A lo lejos eran vigilados por su guardia personal. Eduardo y Ruby, dos de los más confiables en el séquito del jefe.

Los tres pequeños del Boss de la mafia.
Diego, Jouta y la pequeña Karla.

- ¡Ya acabo tu tiempo ahora es mi turno! - exclamo el niño de cabellos rubios oscuros.

- no es cierto aún puedo tener el juguete en mis manos - respondió un niño de bellos rostro infantil.

- eso es mentira ya llevas jugando mucho con el cochecito ¡Dámelo! - volvió a hablar el niño de mechas rubias

- ¡NO! -

- ¡SI! -

- ¡Que no !-

- ¡Que si! -

- ¡Que no! -

- ¿Y si jugamos a otra cosa? - propuso con pena una niña de cabellos bicolor al igual que sus ojos. Con los tonos rojo y azul.

Ambos niños se miraron. Los ojos color azul claro chocaron con la mirada semi afilada de Diego. Sus ojos color café claro era poco común en alguien de hebras rubias.

Aún no entendía como es que su padre acepto a estos niño en si casa. Diego era una especie de lagarto humano por su conducta extraña y casi salvaje y Karla era tranquila pero una niña rara que decía cosas extrañas, sin duda alguna les faltaba mucho para estar a la altura de su familia.

- aceptaré tu propuesta - sentencio Jouta - dime ¿Qué juego propones? -

La mirada bicolor de Karla se iluminó con fuerza dejando muestra su alegría contenida.

- ¡Las escondidas! - dijo casi en un grito.

- ¡Eso es aburrido! - se quejo Diego - mejor otra cosa -

El brillo alegré de Karla casi se apaga ante la respuesta de su hermano.

- pero yo quiero jugar a las escondidas,... Adentro no podemos jugar por las cosas caras del señor Bruno - se justifico la menor.

- por mi no hay problema - dijo Jouta en un tono orgulloso - te permitire está vez cumplir con tu deseo -

- si claro el sangrón por delante - dijo Diego.

- en este caso tu primero - respondió Jouta.

- ¡Oye! -

- ¡ya dejen de pelear y juguemos! -

- está bien - dijeron los dos al mismo tiempo.

- bien, Diego tu cuentas -

Diego le hizo caso a la menor y se acercó al tronco de un árbol tapándose los ojos sin mirar a sus dos compañeros.

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