- Memorias de un cachorro -

18 6 12
                                    

Esta pequeña anécdota/sección fue inspirada por la señorita RaiRMRR.  Aquí explicare o contaré la infancia de mis personajes/ocs

Asique a ver los traumas, digo la bella sección de mis niños chikitos.

.............................................................

Mi abuelo me decía que los niños más solos eran los más creativos e interesantes. Yo recuerdo estar siempre sola.

Mi mamá me tuvo a templana edad, ella Hiba en la universidad cuando llegue a su vida, al parecer fui el producto de una calentura de cinco meses sin protección.

Cómo toda historia, mi "progenitor" masculino dejo a mi mamá y está tuvo que dejar los estudios y salir adelante conmigo, la madre de mi mamá -la que pudo ser mi abuela- la dejo a su suerte, solo mi abuelo se quedó con ella.

Crecí más pequeña de lo normal en un bebé promedio, al parecer tenía las posibilidades de nacer muerta, pero burle a la muerte en mi nacimiento y sigo aquí.

Tras no terminar los estudios mi madre tuvo que tener trabajos no muy estables y en algunos la explotaban para traer el pan a la mesa. Me dejaba bajo el cuidado de mi abuelo el cual fue una de las mejores cosas en la vida.

El abuelo, él enseñó tanto como mi infantil mente podría adsorver. Desde cuántos raros hasta leyendas y viajes en moto que adoraba por la velocidad y la adrenalina en la carretera.

Eso era lo positivo en mi infancia. En las escuelas era un tema muy aparte que me generaba lágrimas solo recordar.

Era la "niña rara del grupo" siempre jugaba en el patio, escalaba los árboles, me metia en la maleza y sacaba insectos de la tierra, desde gusanos, orugas, lagartijas, una vez agarre una serpiente y la mostré en el salón, ese día llamaron a mi mamá y me dieron una gran regañada y golpiza.

No era mi culpa que esas niñas sean tan ...... ¿Niñas? Yo solo era yo, me gustaba jugar en el lodo, plantar plantas, leer cuentos, hablar con los gatos, esconderme en el monte y cantar bajo la luna.
Mi madre siempre deseo que fuera tranquila, limpia, ordenada, educada y sencilla, como esas niñas,..... Yo no era así, no podía fingir ser algo que no era, y al parecer para corregirme me regañaban y pegaban.

Lloraba en las noches por las burlas de mis compañeros y los regaños de mi mamá, mi abuelo estaba en otro lado y no siempre me podía consolar o defender.
En las noches cuando los monstruos llegaban tenía al confiable señor león, un peluche que me protegía de todo en las noches.
También en la noche llegaba mi amigo el jaguar. Era un enorme jaguar negro con brillantes ojos dorados. Amaba sus ojos, eran como estrellas y deseaba que los míos brillarán igual.

En el parque la cosas eran igual, los niños se alejaban y nadie se acercaba a mí por miedo a sacar una de mis cosas raras del bolsillo, suerte que jugaba con mis amigos imaginarios, eran muy amables conmigo y me dejaban dibujarlos, aún no entiendo porque se espantaban al verlos en mis hojas, solo eran muy altos, negros y con ojos brillantes.

Más de una vez llamaron a mi mamá por eso y cada que lo hacían era otra regañada y pegada.

Creo que lo más feo y lindo de mi infancia fue mi fiesta de cumpleaños. Recuerdo que deseaba hacer amigos y escuché que para eso debes hacer una fiesta de cumpleaños genial, asique fui con mi madre y con ayuda de mi abuelo convencí de hacer de mi fiesta de cumpleaños una genial, había de cumplir como 8 años.

Había de todo, comida, pastel, piñatas, dulces de regalo, un castillo inflable y de más cosas. Había dado aviso de antemano e incluso invitaciones en toda mi escuela y en los niños de mi calle.

Ese día me levanté con entusiasmo y ánimo, me puso mi mejor vestido, me peine bien, ayude en las preparaciones y me comporte como mi mamá quería en la hora de espera.

Entonces.

¿Por qué no vinieron?

Me quedé horas esperando, espere y espere hasta que me quedé dormida. Recuerdo que mamá no me veía la cara y llamaba con enojo, mi abuelo no dejaba de grabar con la cámara. Me puse a pensar y revisaba las invitaciones por si me había equivocado de fecha o de dirección.

Llegó la noche y nadie habia venido ese día. Yo creia que vendrían en cualquier momento, mí mente infantil me ayuda a encubrir la verdad. Hasta que llegó mi regalo.

Un gatito. Un gatito con un moño en su cuello, mi abuelo me lo había dado y con eso olvide todo el mal día. Lo llame Tezca en nombre de mi amigo imaginario.

De ese día en adelante mamá tuvo una mala relación con mis compañeros de escuela, pero no entiendo porque, d seguro se les olvidó mi cumpleaños o tuvieron cosas más importantes que hacer como ella lo dice.

No e tenía otra fiesta así, pero no importa, tenía a mi gato conmigo y era felíz, también me dieron un nuevo libro de cuentos pero eso es otro tema.

......................................................................

Primera parte de esta sección (?) Bueno falta ver el de los demás y como esto compone algunas Cosas.

Aclaraciones.

Esto a Sido narrado desde el punto de vista de ellos en niños como de doce o diez años.

Surt veía sombras de tezcatlipoca lo que eran sus amigos imaginarios.

Las maestras siempre citaban a su madre por los dibujos de su hija en al mostraba escenas "poco normales" en un niño de su edad, en eso las sombras alrededor.

El abuelo de Surt siempre la grababa como recuerdo de su niñez. Tiene una caja llena de grabaciones.

Los niños no querían a surt.

El cumpleaños de surt es el 13 de octubre. Si, un día trece.

Desde niña tenía pesadillas con Kukulkán, en la que la comia viva.

Mis personajes e historias.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora